El Festival de Cine Latino de Chicago (EU) cierra hoy su 27ª edición con una noche de clausura en homenaje a México, en la que se proyectará la película «Chicogrande», de Felipe Cazals, y se premiará a su protagonista, el actor Damián Alcázar.
El certamen, no competitivo, otorga cada año un galardón honorífico a una figura latina que representa un modelo a seguir para toda la comunidad.
Alcázar, uno de los actores más célebres del panorama mexicano, recogerá hoy en Chicago el premio «Gloria» , que otorga el festival desde 1999, cuando se hizo con él la cantante Celia Cruz.
«Me tomo este reconocimiento como un impulso más para seguir trabajando por un cine iberoamericano de mayor calidad» , dijo el actor, que interpreta a un «soldadito» que protege a Pancho Villa en «Chicogrande» .
Alcázar protagoniza además otras dos películas que se proyectaron en el certamen: la colombiana «García» , de Jose Luis Rugeles, y la costarricense «El último comandante» , de Vicente Ferraz e Isabel Martínez.
«Esta gran versatilidad para interpretar papeles completamente diferentes es una de sus grandes virtudes» , consideró el director del certamen, Pepe Vargas.
Y es que el público de Chicago ha podido ver al mexicano en la piel de un comandante que decide cambiar el uniforme por clases de chá-chá-chá, de un marido sumiso al que le engaña su esposa, y de un humilde soldado que acaba teniendo un papel más importante del que se le suponía en un principio.
A la proyección de «Chicogrande» , le seguirá esta noche una fiesta mexicana con gastronomía y música popular del país, con la que se pondrá fin a esta edición del festival, a la que ha asistido un 5 % más de público que el año anterior, según las estimaciones de Vargas.
«No hemos podido repetir el aumento que registramos en 2010, del 15 %, pero sí hemos logrado cumplir nuestro objetivo de seguir creciendo y mantener una programación de gran calidad» , explicó el colombiano, afincado en Chicago.
La película más aclamada de esta edición, a falta de que se conozca mañana el premio del público, ha sido una coproducción cubano-venezolana, «Habana Eva» , de la directora Fina Torres, que obtuvo el premio Cámara de Oro de Cannes con su opera prima «Oriana» en 1985.
En la cinta, Torres convierte a Eva, la protagonista, en la metáfora de una Cuba que se debate entre el ayer y lo que podría ser el mañana.
Otra película que llenó las salas del Festival fue la colombiana «Los Colores de la Montaña» , de Carlos César Arbeláez, que llegaba precedida de un rotundo éxito de taquilla en Colombia y que podrá verse en los cines de 20 países.
Entre las españolas, fueron muy aplaudidas «Nacidas para sufrir» , de Miguel Alabadalejo, «Vidas pequeñas» , de Enrique Gabriel, y «18 comidas» , de Jorge Coira, que sorprendió con una narración estructurada a través de los desayunos, las comidas y las cenas de un mismo día y de un amplio elenco de personajes.
El Festival de Cine Latino de Chicago, que reunió este año 120 películas de América Latina, España, Portugal y EU, presume de tener una filosofía contraria a la de la industria de Hollywood y huye de «las estrellitas, el glamour, y la alfombra roja» , ironizó Vargas.
«Aquí lo importante es el contenido, las películas» , añadió.
No obstante, esta edición contó con la presencia del aclamado actor argentino Leonardo Sbaraglia, que copó la atención de los flashes y despertó la locura entre sus fans de Chicago en la apertura del certamen, donde acudió a presentar su filme «Sin retorno».
Con la celebración mexicana de esta noche se pone fin al certamen, que arrancó el pasado 1 de abril, y que como cada año, llevo la variedad del mundo latino al corazón de Chicago.
Agencia El Universal