México, D.F.- Activistas de Greenpeace en 19 países alertan sobre los 400 reactores activos en el mundo, que constituyen un riesgo para cientos de millones de personas. En México, con una carta gigante, para que no olvide la magnitud de la crisis nuclear de Fukushima, Greenpeace pide a la Sener reconsidere el planteamiento de construir dos nucleoeléctricas más en Laguna Verde sin tomar en cuenta las consecuencias sociales, ambientales y económicas de un desastre nuclear.
A pocos días de cumplirse el primer aniversario de la crisis nuclear en Japón; activistas de Greenpeace México llevaron al secretario de Energía, Jordy Hernández Herrera, una enorme carta con el mensaje Sener: el próximo Fukushima será tu responsabilidad, ya que la dependencia ha planteado construir más centrales nucleares en México sin tomar en cuenta las consecuencias para la población si en nuestro país ocurriera un desastre radiactivo.
Los activistas acompañaron la misiva con un mensaje en inglés: Fukushima disaster you’ll be responsible for the next one, ya que este mismo día se realizaron acciones similares en otras 19 naciones que generan energía con plantas nucleares.
“El secretario de Energía olvida que los accidentes en Chernobyl, Tres Millas y Fukushima han puesto en evidencia la peligrosidad de las centrales nucleares. La construcción de más nucleoeléctricas en México representa un grave riesgo para millones de ciudadanos. De ocurrir un accidente nuclear en el país será responsabilidad del secretario Jordy Hernández y del gobierno mexicano, por avalar un tipo de energía tan peligrosa”, aseguró Beatriz Olivera, coordinadora de la campaña de energía y cambio climático de Greenpeace México.
De cara al fin de sexenio, el desafío consiste en invertir en el aprovechamiento de energías seguras, limpias y renovables como las que se obtienen del sol, la fuerza del viento o las corrientes marinas. Si las inversiones destinadas a combustibles fósiles se asignaran a la obtención de energías renovables, se podrían generar empleos, integrar cadenas productivas y promover el desarrollo regional. De acuerdo a un estudio elaborado por Greenpeace, para 2030, el país podría abastecer 70 por ciento de su electricidad únicamente con fuentes renovables, sin necesidad de construir nuevas centrales nucleares.
“No debemos esperar otro sexenio para considerarlas seriamente como una apuesta segura para el desarrollo económico del país”, agregó Olivera.