Ahora es el tiempo de los hijos en cine

Hijo de tigre…pintito! Así podría llamársele, de manera amigable, a la película Después de Lucía, que comenzó rodaje en Puerto Vallarta.

La razón es simple: los personajes principales son Tessa Norvind, hija de Nailea Norvind; Gonzalo Vega, vástago del actor del mismo nombre, y Tamara Yazbek, hija de la reconocida Patricia Bernal, mamá de Gael García.

“Es gente de mi confianza, fue coincidencia, como que Tamara es en la vida real, la mejor amiga de Tessa”, refirió el director Michel Franco.

El largometraje cuenta la historia de un padre y su hija que abandonan la ciudad playera, tratando de dejar atrás el fallecimiento de un ser querido.

“Se trata de una historia que ya llevaba intentando levantar desde hace tiempo y por fin ya comenzamos a hacerla”, indicó el realizador.

Franco es conocido en el medio cinematográfico por su cinta Daniel y Ana, que se estrenó en Cannes, levantando críticas favorables.

Y por haber ganado, en 2003, el Danzante de Oro, máximo premio que otorga el Festival de Cine de Huesca, en España, con su cortometraje Entre dos.su noveno corto,

Ahora con Después de Lucía contó cuenta con el apoyo de Lemon Films (Salvando al soldado Pérez) y Marco Polo Constandse (Amar no es querer). Pop Films, la productora de Franco, también participa.

“Es una historia muy padre, que creímos necesario apoyarla para que se pudiera hacer”, indicó Fernando Rovzar, fundador de Lemon Films.

En el papel de padre se encuentra Hernán Mendoza (Cielo rojo), quien rodará al igual que todos en locaciones de Valle de Bravo, Puerto Vallarta y la Ciudad de México.

Una más

Pero Después de Lucía no es la segunda película del entrevistado, sino su tercera en sólo cuatro años.

La otra se llama A los ojos y es protagonizada por Mónica del Carmen (Año bisiesto).

Rescata la anécdota del ya mencionado corto Entre dos, una historia que aborda la problemática en torno a la donación de órganos y el conflicto que se plantea entre un matrimonio con su hijo enfermo.

El resto de la gente que aparece a cuadro son no actores, sino reales niños de la calle.

“Estaba terminándola de editar cuando llegó la oportunidad de hacer la nueva película, se fueron dando las cosas muy rápido.

“Trabajamos en colaboración con Casa Alianza para la película”, destacó Franco.

Agencia El Universal