* La reforma laboral y la manzana envenenada de FC
* La izquierda, Televisa y el mentís del IFE y del Trife
En el ambiente flota el futurismo, la esperanza.
Aunque el gobernador César Horacio Duarte se esmera en su segundo informe en agradecer los apoyos federales para Chihuahua, en su discurso habla de nuevas épocas para el país a partir del 1 de diciembre, el día del asunción de Enrique Peña Nieto a la Presidencia de la República.
Hoy, dice la clase política reunida en el gimnasio Manuel Bernardo Aguirre, es momento de reflexiones sobre uno y mil problemas: muertos cifrados en casi 80 mil en el sexenio, desempleo galopante, crecimiento de la pobreza, aumento desmedido en alimentos, creciente dependencia del exterior, una crisis cuyos efectos apenas se asoman en el horizonte internacional y de los cuales ha tomado nota no solamente Peña Nieto, sino su equipo de transición.
Sentado en primera fila, Juan Carlos Cortés, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) y representante del empresariado nacional en el equipo de transición, da una cifra ilustrativa:
-Las reservas de alimentos de Estados Unidos han descendido considerablemente por la baja producción mundial. Ellos acostumbren mantener un stock para 50 días: ahora apenas tienen para once días. Son los principales abastecedores de México y al rato no van a tener para vendernos.
-Una décima parte, digamos…
-Sí.
-¿Y México?
-No sabemos. Sólo sabemos que vienen tiempos difíciles. En gran parte se alimenta de importaciones. Ahora debemos esperar el final del temporal para saber en cuánto andan nuestras cosechas, pero la sequía nos ha dejado marcados.
Del mismo tema y también en primera fila habla el duranguense Jorge Herrera Caldera, presidente de la Comisión de Infraestructura de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago):
-Los últimos dos meses nos han sido favorables. Ha llovido en el norte como no pasaba en dos años, pero el agua de las presas es insuficiente. Con este diagnóstico hemos elaborado un proyecto de inversiones y ya lo negociamos con el equipo de transición del presidente electo.
Se trata de elaborar por fin un mapa nacional hidráulico, con obras emergentes y proyectos a mediano y largo plazo. El problema del agua apremia, pero hay otros planes como los carreteros para integrar regionalmente al país.
La crisis hídrica, refieren el zacatecano Miguel Alonso Reyes, el coahuilense Rubén Moreiran y el duranguense Herrera Caldera, deberá atenderse ya para evitar otra debacle rural.
En esos momentos dice Duarte en su informe:
-En Chihuahua murieron 50 mil reses por la sequía.
Pero hay un dato peor:
-La falta del agua obligó a programas emergentes de abasto a 500 mil chihuahuenses. Los atendimos de acuerdo a nuestra posibilidades en coordinación con el gobierno federal…
En todos los gobernadores del norte, incluido el sinaloense Mario Löpez Valdez y el sonorense Guillermo Padrés, de raigambre o relación panista, hay un sentimiento contra el gobierno de Felipe Calderón: mil veces acudieron a tocar puertas en busca de apoyo y los recursos no llegaron.
Hoy el tema está en la primera lista de urgencias del próximo gobierno.
CALDERON NO CONSULTÓ A PEÑA LA REFORMA LABORAL
Datos recopilados aquí y allá permiten dar una información: Felipe Calderón mandó su proyecto de reforma laboral motu proprio, sin consenso con su sucesor Enrique Peña Nieto.
El priísta traía la intención de modificar las relaciones obrero-patronales, peor lejos de la visión de su antecesor panistas.
Durante sus dos encuentros oficiales pudo hablarse genéricamente de las reformas fundamentales -a la laboral se agregarían la hacendaría y la energética-, sin entrar en detalles.
Se adelantó Calderón y, lanzado el tema al debate nacional, Peña decidió ponerle pecho.
Ya no como la quería y como pudo negociarla con todas las fuerzas políticas -sus propósitos son mantener abierto el diálogo y el consenso con la derecha (Acción Nacional, PAN) y la izquierda (la lopista, la perredista, la petisa y la dantesca, que aunque juntas no son las mismas ni obedecen a intereses similares), sino en las condiciones posibles dado el ambiente envenenado del país tras las elecciones de julio pasado.
De la Cámara de Diputados salió en esos términos, en las condiciones de remiendo y resignación obligados.
Pero permitió medir otro aspecto: la capacidad de resistencia y movilización de los grupos radicales, aunque esta vez Andrés López haya decidido mandar a sus huestes del movimiento #YoSoy132 y de otras organizaciones afines sin presentarse él para jefaturarlas.
Su vieja práctica de lanzar la piedra y esconder la mano, de mandar a los suyos y advertir riesgos sociales, como bien le han copiado algunos dirigentes de izquierda y el mismísimo Jesús Zambrano.
Hoy ya saben Peña Nieto, Luis Videgaray, Miguel Angel Osorio Chong y el resto de sus colaboradores a qué le tirarán cuando decidan presentar una iniciativa para abrir más la participación de Petróleos Mexicanos (Pemex) a la inversión privada sin entregar en propiedad el subsuelo, los hidrocarburos ni los beneficios de la comercialización.
Y cuando se lancen por una reforma hacendaría para recaudar con justicia -más quien más tiene- y gastar con proyecto.
Tal vez en ese sentido Calderón le hizo un favor a Peña Nieto.
IFE, TRIFE, TELEVISA Y LA IZQUIERDA RENCOROSA DE AMLO
Lo atacaron sin clemencia.
La izquierda se fue tras él cuando lo acusó de haber violado la Constitución y el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) con supuestos apoyos ilegales al priísta Enrique Peña Nieto en la pasada contienda presidencial.
La izquierda lopista se fue tras él y hasta anunciaron su salida de Televisa porque, especulaban, Emilio Azcárraga no le permiiría semejantes irregularidades.
Nada de eso resultó y los órganos electorales -el Instituto Federal Electoral y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación- negaron con sus resolutos cualquier responsabilidad suya o del consorcio televisivo.
Lejos del castigo, Alejandro Quintero deja la vicepresidencia de Comercialización de la televisora para ser pieza clave de José Bastón, presidente de Televisión y Contenidos, en los propósitos de Azcárraga de apuntalar sinergias en el mercado de Estados Unidos.
Después de ser blanco del lopismo, el propio Azcárraga acompaño a Quintero en la inauguración del Noveno Seminario de Mercadotecnia, uno de los eventos más importantes del grupo.
Hoy Quintero se va a Estados Unidos muerto de risa y la izquierda derrotada se queda a llorar su fracaso sin ese blanco de ataques.
Así es la política.