Os Gemeos se han consolidado como unos de los grandes artistas callejeros del mundo con un estilo muy original y un discurso urbano que destaca entre miles de otras propuestas.
Este dueto originario de Sao Paulo (San Pablo) en Brasil, esta conformado por Gustavo y Otavio que, como su nombre lo indica, son gemelos idénticos. Con una marcada influencia inicial por la cultura del hip hop y del pixacao (movimiento brasileño de graffiti con un código particularmente encriptado) Os Gemeos saltaron en 1987 a trabajar las calles de su ciudad natal.
Al poco tiempo se ganaron el respeto del entorno urbano y comenzaron a liderar, junto con otros miembros de esta generación, un movimiento de arte callejero en Brasil que terminaría por imprimir a los artistas urbanos de este país una identidad propia, en sintonía con sus propias raíces culturales.
Los gemelos comparten una conexión onírica que se enlaza a través de atmósferas de color amarillo que filtran la presencia de distintos seres que desfilan entre sus sueños. Por ello, este color es uno de los más recurridos en los tonos de piel de los personajes que imprimen en muros y banquetas de las calles alrededor del mundo.
En años recientes este talentoso duo a explorado grandes formatos que se acercan a las técnicas del muralismo. Su reconocimiento en Brasil, y en el mundo es tal, que en el año 2000 fueron invitados por el gobierno carioca a participar en la decoración “legal” de los trenes del sistema de metro en distintas ciudades, algo insólito en la historia de las urbes brasileñas. También participaron como invitados especiales en el festival Cultura Nova, en Heerlen, Holanda, donde pudieron trabajar en una superficie de 160 metros cuadrados.
Finalmente, como un laurel mas a su talento, el año pasado fueron parte del selecto grupo de artistas invitados a participar en la exposición dedicada al arte urbano en la fachada de la Modern Tate de Londres. Sus personajes, que se deslizan entre las grietas y texturas de lo cotidiano y lo fantástico, han adquirido un sello distintivo que hace fácilmente reconocible sus obras. Sus dulces quimeras ycon personalidades que recuerdan a una especie de campesino sideral, habitan ya en ciudades de al menos 4 continentes.