Desde el siglo XVI llegaron a territorio novohispano artistas y obras que permitieron conocer diversos lenguajes artísticos provenientes de España, Italia y Flandes. En este tiempo, Flandes era la designación que se daba a la porción sur de los Países Bajos gobernada por el rey de España. La pintura “flamenca”, procedente de esta región, se caracterizó por su dimensión descriptiva, es decir, el dominio técnico del óleo para realizar imágenes de gran realismo con especial cuidado en el detalle.
Los pintores novohispanos conocieron, asimilaron y reinterpretaron este arte, es así que en la pintura del siglo XVII y en menor medida del XVIII, se observa un catálogo variado de cualidades texturales destinadas a engañar la mirada, así como los paisajes con múltiples vistas y la reproducción verosímil de la naturaleza.
En un recorrido de prensa por la exposición temporal Artificios para la mirada, que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presenta en el Museo Nacional del Virreinato (MNV) a partir del 12 de noviembre y hasta el 26 de febrero de 2017, Alejandra Cortés Guzmán, subdirectora técnica del recinto, informó que esta muestra busca evidenciar la tendencia descriptiva de la pintura flamenca en las obras pictóricas novohispanas.
La curaduría estuvo a cargo de Verónica Zaragoza, investigadora del MNV. El museo contó con el apoyo de Elsa Arroyo Lemus, investigadora del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, quien asesoró el proyecto curatorial y escribió el texto de la publicación que acompaña la exhibición.
La exposición reúne una cuidadosa selección de 44 obras —óleos, textiles, orfebrería, mobiliario e impresos— que datan de los siglos XVI al XVIII y muestran diversos detalles de joyería, encajes y bordados, así como de animales, paisajes y arquitecturas. “Estas piezas invitan al público a observar con atención las técnicas pictóricas y no tanto el contenido iconográfico, pues se busca que el espectador note los distintos efectos de color, los planos narrativos y los matices propios del arte flamenco”, expuso Alejandra Cortés.
Para lograr lo anterior, añadió, se seleccionaron 26 obras del acervo del MNV y 18 procedentes de los museos de la Basílica de Guadalupe, Arocena, Soumaya, Nacional de Arte, Nacional de San Carlos y Nacional de las Intervenciones; así como de la Fundación Carlos Slim, la Colección Pérez Simón y la Parroquia de Santa María Ozumbilla, en el Estado de México.
Destacó que para esta exposición, el área de Restauración del MNV intervino y estabilizó varias obras del acervo, entre las que destacan un óleo sobre tela atribuido al pintor flamenco Hendrick de Clerck, donde se representa a la Sagrada Familia y cuya atención permitió descubrir inscripciones que fueron cubiertas en el pasado, así como recuperar los colores originales de la pieza. Del mismo modo, la restauración y el análisis con rayos X y luz ultravioleta de la Anunciación, de Juan Rodríguez Juárez, proporcionó a los expertos valiosa información acerca de las combinaciones de color, los repintes y los materiales aplicados por el propio artista.
Artificios para la mirada está organizada en una introducción y tres unidades temáticas. La muestra abre con San Juan escribiendo el Apocalipsis, óleo sobre tela realizado en 1581 por el flamenco Martín de Vos y enviado, junto con cuatro lienzos más a la Nueva España. Estas obras tuvieron un impacto notable en los pintores de su tiempo y, aún en el siglo XVIII, artífices como José de Ibarra estudiaron esas “viejas” tablas. En esta sección el público podrá ver un video con diversos acercamientos que muestran las cualidades plásticas de las obras.
“La técnica virtuosa” presenta una selección de pintura flamenca de los siglos XVI y XVII, con obras de Hans Memling; Pieter Brueghel, el Joven; Hendrick de Clerck; David Teniers, el Viejo y Jan Breughel, el Joven.
El recorrido continúa con “Verosimilitud: los efectos del óleo”, donde se exhiben textiles, orfebrería y mobiliario, así como obras de Luis y José Juárez, Baltasar de Echave Ibía, Antonio Rodríguez, Juan Sánchez Salmerón, Juan Correa y Cristóbal de Villalpando, en las que se observa cómo a través de técnicas como la transparencia, el difuminado y el empaste, los pintores novohispanos reprodujeron con verosimilitud joyas, encajes, texturas, paisajes y animales.
En esta unidad temática destaca una serie de seis sibilas de autor desconocido que por primera vez se muestran en conjunto, y que también fueron intervenidas por el área de Restauración del MNV. Además, el público podrá ver un video que explica la técnica del óleo y sus posibilidades plásticas.
“Ecos de Flandes en la Nueva España” da cuenta de algunos objetos de origen flamenco —como libros, estampas, pinturas, etcétera— que arribaron a territorio novohispano a través de las rutas comerciales y que permitieron el conocimiento de modelos que serían reproducidos y adaptados por los pintores americanos.
Destaca una Biblia impresa en Amberes por Cristóbal Plantini, o una estampa suelta grabada en la Ciudad de México por el flamenco Samuel Stradanus, objetos que contribuyeron a la configuración de un capital visual que repercutió enormemente en la producción pictórica local; como ejemplo se muestran dos temas que fueron reproducidos de manera reiterada: la adoración de los reyes y las guirnaldas de flores. De ésta última se exhiben dos pinturas de Cristóbal de Villalpando y Juan Rodríguez Juárez.
La exposición cuenta con diversos recursos didácticos, como una sala de mediación, audiodescripciones, videos y cédulas comentadas portátiles. Además, comentó Diego Gaitán, jefe de museografía del MNV, las obras fueron colocadas a una baja altura para permitir al público, especialmente a niños y jóvenes, acercarse a las pinturas y observar sus características de manufactura mediante pequeñas lupas.
También estará acompañada de un ciclo de conferencias a desarrollarse en febrero, talleres, visitas guiadas, una publicación sobre la muestra y un micrositio en la página web del museo, donde podrá conocerse el trabajo de restauración de las obras y las investigaciones que los expertos realizan a partir de sus nuevos hallazgos.
Artificios para la mirada estará abierta de martes a domingo de 9:00 a 17:45 horas hasta el 26 de febrero de 2017. Se ubica en la planta baja del Patio de Naranjos. El costo de acceso al Museo Nacional del Virreinato es de $65 pesos. Maestros, estudiantes, adultos mayores de 60 años, pensionados y jubilados están exentos de pago al mostrar su credencial vigente. Los domingos la entrada es gratuita.