La discusión y eventual aprobación de las reformas y adiciones a la Ley General de Contabilidad Gubernamental permitirá avanzar en la construcción de la democracia fiscalizada que demandan los mexicanos, sostuvo el diputado federal Manlio Fabio Beltrones. La reforma que presentó por la vía de la iniciativa preferente el Ejecutivo Federal, aprobada en días pasados por la Cámara de Senadores, contribuirá a la armonización de las finanzas públicas, el acceso ciudadano a la información financiera y la sanción de las prácticas de corrupción, y además fortalecerá la función de fiscalización de la Auditoría Superior de la Federación y de las instancias de transparencia, así como de la Cámara de Diputados.
La armonización de los criterios y metodologías de contabilidad gubernamental a nivel federal, estatal, municipal y de las demarcaciones territoriales del D.F., así como la regulación de la calidad de la información financiera que se abre al acceso público por medios electrónicos, contribuirá a eliminar y sancionar la corrupción y a regular el endeudamiento público de las entidades federativas y municipales que, de diciembre de 2006 a junio pasado subió un 150% (en paralelo con la elevación de la deuda pública federal, en 15 puntos como porcentaje del PIB, entre 2006 y 2012), sostuvo el coordinador parlamentario en una reunión de evaluación con legisladores de la bancada del PRI.
La fiscalización de las transferencias federales, en especial en materia de educación, salud, seguridad pública e infraestructura municipal, así como de las ayudas y subsidios a sectores sociales y económicos, eliminará las prácticas discrecionales, alentará el fortalecimiento de los ingresos propios de las entidades federativas y municipales y, en conjunto, aportará al crecimiento y el desarrollo regional. Se trata de que el ciudadano tenga la certeza que los impuestos que paga tienen una buena aplicación; que sepa en qué se gasta y cuáles son los beneficios finales del gasto ejercido en todos los ámbitos de gobierno, sin áreas de opacidad.
Durante un periodo de transición gubernamental del que poco se esperaba y con base en la iniciativa preferente, la LXII Legislatura está logrando acuerdos fundamentales en beneficio de México, al restaurar la funcionalidad de un régimen que parecía condenado a la parálisis y, en este caso, atendiendo la demanda ciudadana de una mayor transparencia y eficacia en el ejercicio del gasto público federal.
La Iniciativa Preferente, iniciada con la Reforma Política del presente año, ha modernizado la relación entre el poder Ejecutivo y el Legislativo y perfila la transformación del régimen en una democracia fiscalizada y de resultados. Ello habla del nuevo México que estamos construyendo y, por lo mismo, seguiremos respondiendo con presteza a las iniciativas que el presente gobierno y la administración federal entrante propongan para el cambio con rumbo que México necesita, finalizó el coordinador parlamentario del PRI.