Buscan inhabilitarme para futuras elecciones

Amalia García Medina advierte que uno de los objetivos de la campaña “de desprestigio, calumnia y linchamiento público” que ha iniciado el gobierno de Zacatecas en su contra, es intentar inhabilitarla para contender por un cargo de elección popular, como la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal en el año 2012.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Amalia García sostiene que con la persecución que encabeza el gobernador Miguel Alonso Reyes ha regresado una vieja forma de hacer política “que había sido superada… es la época negra del PRI” en la que se utiliza todo el poder de un Ejecutivo contra sus adversarios.

Al responder a los señalamientos de presuntos actos de corrupción en su administración, la ex gobernadora de Zacatecas afirma que los operadores de la persecución pertenecen al grupo de Ricardo Monreal y rechaza la posibilidad de que se use este asunto para no fiscalizar a gobernadores salientes del PRI.

¿Hay señalamientos del gobierno de Zacatecas sobre la administración que encabezó?

Fueron violatorios de la ley, de los procedimientos que deben de seguirse, por eso digo que hay abuso de poder.

En este momento todo lo que conozco yo y lo que conoce mi equipo ha sido a través de los medios de comunicación, no se está llevando a cabo un procedimiento que da garantías constitucionales y que establece la ley que debe de seguirse por una institución profesional, imparcial.

El gobierno de Zacatecas ha decidido una ofensiva con todo el poder que significa ser Poder Ejecutivo y no hay imparcialidad, no hay una actuación rigurosa. En Zacatecas la Contraloría está encabezada por una persona que acaba de dejar de ser dirigente de un partido, entonces se politiza.

¿Ha mentido la Contraloría de Zacatecas?

Mientras no llamen, no haya citatorios, ni la convocatoria legal y no se hayan aportado elementos con cada uno de los que han sido aludidos directa o indirectamente, ha sido un juicio abusivo; el gobierno de Zacatecas ya enjuició, hizo juicios sumarios, juzgó y condenó.

Pero gastar 102 millones de pesos en artistas, cuando los 22 municipios más pobres del estado no alcanzan todos juntos a tener esa cifra ¿por qué no vetó esa partida aprobada?

La gente necesita empleos y la actividad artística y cultural realizada, como se vio, fue para generar empleos. Por cada cuarto de hotel que es ocupado se generan cinco empleos. Como gobernadora decidí generar empleos y la actividad cultural y las actividades artísticas estaban vinculadas a eso en todo el estado.

El actual gobernador se desempeñó como mi secretario de Turismo, realizamos eventos culturales y revisé cuánto impacto económico podrían tener en generación de empleos. La presencia de artistas fue para que hubiera derrama económica y yo lo hice convencida de que generar empleos es una prioridad.

¿Durante su gobierno no detectaron esas facturas falsas, manipulación de programas sociales, sobreprecios pagados, según lo que ha asegurado la Contraloría?

Según la Contraloría que ya juzgó y que encontró culpables sin haber citado a los aludidos, los tiene que citar a menos que, como todo mundo lo percibe, haya una decisión política. No importa que se aporten elementos a la investigación, eso parece que no importa.

¿En qué caso una Contraloría hace una gira por medios de comunicación?, pues en Zacatecas se inaugura un procedimiento violando garantías y el Estado de derecho, usando el poder del Estado, de la contraloría y politizando.

Entonces tienen que salir a desvirtuar.

En este caso ya se calumnió y se linchó públicamente. Hay no sólo abuso de poder, sino que es una vieja práctica por quienes han utilizado el poder como instrumento político y las instituciones para beneficiarse. La Contraloría es utilizada políticamente y ya se anunció que con la Procuraduría va a ser así.

Lamentablemente no es nuevo, tenemos en el país una historia de quienes han utilizado el poder para lastimar y destrozar. Es la época negra del PRI. La pregunta es si éste es el regreso de esos tiempos y de esas prácticas. Hay la determinación de utilizar esas viejas prácticas y todo el poder público y las instituciones no como instancias profesionales sino como instancias de poder.

¿Cuál fue la deuda total que dejó al estado?

Todos los gobiernos, de todos los estados y países, contratan crédito y deuda, algunos lo hacen de manera inmediata y otros espaciada o parcial, lo hacen conforme a la ley, es algo usual; yo no he sido convocada ni citada formalmente, tampoco el secretario de Finanzas para aportar elementos.

El instituto de la Cámara de Diputados, que es una instancia imparcial, pues da información a diputados de todos los partidos, tiene el dato de que la deuda contraída fue de 600 millones de pesos.

La Contraloría dice que son más de 2 mil millones de pesos de deuda.

El crédito es otra cosa. El crédito fueron 300 millones y lo usual es que si existe el recurso se paga y si no se renegocia. La responsabilidad de no renegociar es del actual gobierno. No lo hicieron por razones políticas. En total son 600 millones de deuda y 200 millones por el crédito.

¿Para qué utilizó ese dinero?

Para la labor de gobierno. Para programas sociales, por ejemplo el de “Jefas de familia”, mujeres que están solas y que requieren un respaldo para poder salir adelante. Recibían un apoyo. Pero el actual gobierno ya está cancelando ese programa. Fue para que las acciones de gobierno y las obras no se detengan.

¿Sería una visión corta dejarlo en un cobro de facturas o va más allá?

Yo lo veo como una práctica que ya había desaparecido en el país y que está regresando. Utilizar todo para aplastar al adversario. Vemos que se está abonando desde el gobierno del estado a la confrontación de la sociedad zacatecana.

En su opinión, ¿quién está detrás de esto?

Quien está delante es el actual gobernador priísta —Miguel Alonso Reyes— y su equipo. El contralor.

Que es petista y monrrealista.

Usted lo dijo. Eso es algo público. Efectivamente.

Si son calumnias, si hay un linchamiento público, entonces ¿va a demandar?

Lo que he pensado es si en verdad tendrá caso, si demandar podrá servir de algo. Con la periodista Lydia Cacho, que era tan fuerte y nítido que requería justicia, no pasó nada. Sí, soy una figura política, pero también una ciudadana de a pie sin el poder político.

¿Con poder moral?

Es lo que desean minar. ¿Por qué hacen eso sin habernos convocado y sin haber hecho los citatorios?, pues porque ellos no quieren esperarse a que esto se esclarezca, la intención es aniquilar políticamente ante la ciudadanía.

He afrontado cosas tan duras a lo largo de mi vida que tienen que ver con mi presencia pública; ahora vuelvo a enfrentar al poder que ya enfrenté en el pasado, ya viví ese poder, y fui víctima de abuso y persecución y salí adelante, ahora saldré también adelante.

Duele que el Estado de derecho no se respete y que incluso una persona como yo tenga que plantearse si utiliza una figura legal de recurrir ante la justicia ante la difamación y la calumnia que estoy viviendo y lo pienso dos veces porque digo: no va a pasar nada, ¿para qué?, eso duele.

Bueno, ¿y cuál sería el objetivo de esto?

Demostrar a quien sea, que cualquier ciudadano está a la merced del abuso y por eso reitero: me preocupa la gente de Zacatecas. Parece que es el regreso de lo peor en abuso y control y en atropello de garantías constitucionales.

¿Tiene un objetivo político?

No quiero descartar que se trate de una intención política porque hay quienes señalan, en la prensa, la posibilidad de que yo pueda ser candidata a la jefatura de Gobierno del Distrito Federal para el año 2012, por ejemplo; habrá quienes digan que se trata de intentar una inhabilitación para que participe políticamente.

¿Usted quiere ser jefa de Gobierno del Distrito Federal?

Quienes participamos en la vida pública tenemos las posibilidades de que quienes nos ven como adversarios utilicen distintos instrumentos. En una democracia el mejor instrumento es la competencia, el debate y la exposición de las ideas, pero aquí es una acción para acabar con una gran cantidad de personas aludidas.

¿Siente que el objetivo de las acciones emprendidas por el actual gobernador de Zacatecas es inhabilitarla?

No he dicho a qué cargo quiero ir, es evidente que quienes me ven posibilidades, y claro que me están viendo posibilidades, es un grupo político y un gobierno, que desean acabar con esa posibilidad, ¿quiere decir que las posibilidades eran realmente importantes?, puede ser de acuerdo con las conclusiones que ellos puedan tener, del tamaño de la ofensiva que han emprendido es el temor al cargo o al espacio que yo pudiera ocupar.

¿Usted cree que puede ser ésta una acción emprendida para tratar de blindar a gobiernos priístas que están por terminar y que serán sustituidos por gobiernos aliancistas?

Lo que puedo decir es que, en todos los casos, estoy segura que en el estado de Oaxaca se dará, con el nuevo gobierno —que encabeza Gabino Cué—, el respeto a las garantías que establece la ley en un Estado de derecho, que las auditorías se realizarán respetando el estado de derecho, donde no se hace así es en Zacatecas.

Tampoco creo que deba ser sujeto de una negociación de ninguna manera el Estado de derecho; de aquí violentamos y podríamos dejar de violentar si acá negociamos; a mí me parece que no debe ser así.

Agencia El Universal