La emblemática banda de rock Caifanes confirmó la lealtad de sus seguidores al llenar en su totalidad el Palacio de los Deportes, lo que calificó el vocalista como el concierto de la «Pasión y la memoria».
En punto de las 21:30 horas se apagaron las luces del domo de cobre y el público estalló en jubilo al ver a sus ídolos musicales, reflejados en una pantalla de gran formato, deambulando por los pasillos del recinto rumbo al escenario.
Enseguida los músicos sorprendieron a sus fieles amantes con el tema «Negro cósmico» y «Para que no digas», las cuales fueron coreadas por el público de principio a fin y con ello hicieron retumbar el domo de cobre.
La locura del público se desató cuando Saúl Hernández agradeció la presencia de los asistentes, no sin antes reconocer que a pesar de no tener un disco nuevo o un video clip, siguen gozando del apoyo de sus fieles seguidores.
«Muchas gracias, no tendremos nada nuevo, pero podemos ver que la pasión sí tiene memoria y por eso están aquí con nosotros», expresó el vocalista para luego interpretar «Miedo», «Viento», «Cuéntame tu vida» y «Aquí no es así».
La noche se tornó corta ante tanto disfrute musical y recuerdos de aquella juvenil banda, que en este concierto mostró madurez entre sus integrantes y en su música a pesar de la pésima acústica del recinto, calificado por los asistentes como el «Palacio de los Rebotes».
La ideología de la agrupación no se hizo esperar al comentar en el escenario que: «cuando hicimos esta canción era para denunciar las injusticias sociales y vemos que no ha cambiado mucho esa realidad, seguimos siendo una sociedad relegada políticamente hablando».
Saúl Hernández recordó que esa canción es «Aquí no pasa nada», misma que fue coreada con intensidad por los asistentes, que se olvidaron incluso de la lluvia que cayó en las inmediaciones del foro deportivo.
La banda incluso mostró que siguen tan contestatarios como cuando eran jóvenes e iniciaban con este proyecto musical de Caifanes, al lamentar lo que está ocurriendo con la fauna, sin precisar dónde, al dedicar la canción «Tortuga».
Los recuerdos fluían y las cervezas frías también, lo que puso más eufóricos a los amantes del grupo, que retribuyó con un cierre de antaño al interpretar sus más grandes éxitos «Mátenme porque me muero», «De noche todos los gatos son pardos», «Perdí mi ojo de venado» y «Ayer me dijo un ave».
En el marco del concierto, la reventa se llevó un descalabro al tener que rematar los boletos que no pudieron vender y expenderlos a la mitad de su precio; en tanto, quienes se vieron beneficiados fueron los acomodadores de autos, que vendían el espacio entre cien y 150 pesos.
Minutos antes de que concluyera el recital, los puestos ambulantes ya habían cercado las salidas del Palacio de los Deportes con todo tipo de artículos «pirata» sobre la banda rockera, desde playeras hasta tasas, encendedores, posters, fotografías y llaveros.
INF./GRUPO FÓRMULA/NOTIMEX