La familia real británica asistió ayer el servicio del día de la Orden de la Liga en el castillo Windsor. La reina Isabel estuvo acompañada por su marido, el Príncipe Felipe, los recién casados duques de Cambridge y los demás miembros de la familia.
El Día de la Liga es una ceremonia simbólica donde los ‘guardias del honor’, escogidos por haber ocupado cargos públicos y contribuído a la nación o servido personalmente a la monarquía, se encuentran para recibir el más alto rango de caballería.
La duquesa de Cambridge observaba sonriente a su marido, el Príncipe Guillermo, vestido de uniforme y desfilando junto a su padre, el Príncipe Carlos.
Precisamente Catalina fue la gran protagonista de la jornada, y es que cada una de sus apariciones públicas levantan un aluvión de fotógrafos y medios de comunicación. A estas alturas ya se ha postulado como Catalina «la Estilosa» y nuevamente, la duquesa volvió a provocar señales de aprobación con su look en gris perla, con un abrigo a la rodilla, vestido en el mismo tono, zapatos de tacón y tocado de Philip Treacy, el sombrerero más famoso de Reino Unido.
Con información de abc.es