Una mayoría de católicos mexicanos acepta se practique el aborto en algunos casos y favorece el uso de anticonceptivos, en contraste con la postura de rechazo por parte de la Iglesia sobre ambos temas, reveló hoy una encuesta de Univisión.
La postura de los católicos mexicanos sobre el divorcio resultó igualmente distante de la iglesia y acorde a la actitud registrada entre los católicos de otros países de Latinoamérica, según un sondeo levantado a solicitud de la cadena de televisión Univisión.
A pesar de ello, la investigación mostró que tanto la iglesia como su feligresía en México están a tono en otros sensibles temas como el matrimonio de sacerdotes, la ordenación de mujeres para oficiar misa y los matrimonios entre homosexuales.
Un 66 por ciento de los encuestados en México se declaró opuesto a la idea de permitir que los sacerdotes se casen, contra 32 por ciento a favor, en tanto que otro 63 por ciento se declaró opuesto a la posibilidad de la ordenación de mujeres como sacerdotas, contra un 35 que lo favorecieron.
Igualmente el rechazo a los matrimonios entre personas del mismo sexo fue mayoritario, con una oposición de 62 por ciento, en contraste con el 36 por ciento que se dijo a favor de esa posibilidad.
El inusitado porcentaje de quienes están a favor del aborto en algunas circunstancias reflejó un enorme relajamiento en una postura sobre la que la Iglesia católica mantiene una actitud de cero tolerancia.
Mientras 27 por ciento declaró que el aborto constituye una práctica que no debe permitirse nunca, otro 68 por ciento se pronunció por permitirlo en algunos casos y apenas un 5.0 por ciento dijo estar a favor.
De igual manera, otro 88 por ciento de los católicos mexicanos dijo favorecer el uso de anticonceptivos, contra una oposición de 11 por ciento, la más elevada entre los otros tres países latinoamericanos incluidos en la encuesta: Colombia, Brasil y Argentina.
La posición respecto al divorcio pareció igualmente ser de mayor tolerancia ahora, con 60 por ciento de los católicos mexicanos que dijo estar en desacuerdo con la postura oficial de que las personas divorciadas y casadas de nueva cuenta fuera de la Iglesia viven en pecado.
Apenas un 36 por ciento dijo estar de acuerdo con esta doctrina.
Los resultados dejaron en claro una línea generacional entre las posiciones a favor y en contra, ya que la encuesta mostró que las personas que están más de acuerdo con las posturas de la Iglesia son mayores a los 55 años de edad.
La encuesta fue aplicada a 12 mil 038 católicos en 12 países de cinco continentes que representan 61 por ciento de la población católica mundial y presenta un margen de error de 0.9 por ciento.
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