Una nueva reinterpretación de la famosa «Piedad» de Miguel Ángel ha suscitado la polémica en Italia por representar a la Virgen María, protagonista de la obra, con el cuerpo de un esqueleto inerte y el rostro de la muerte.
Titulada «Sueño Compasivo. Piedad V» , la obra del artista belga Jan Fabre compartirá protagonismo con la 54 edición de la Bienal de Arte de Venecia, ya que estará expuesta en la ciudad del norte de Italia en las mismas fechas en las que se celebra el festival artístico, es decir, desde el próximo 1 de junio hasta el 16 de octubre.
«Lejos de proponer un mensaje blasfemo o sencillamente provocativo, la obra de Fabre representa una escultura representativa que trae a escena los verdaderos sentimientos de una madre que querría cambiarse por su hijo muerto» , explican a través de un comunicado los organizadores de la muestra «Piedades».
La nueva imagen de la Virgen, sin embargo, no es el único elemento controvertido de la escultura del artista belga, que también ha querido representar el rostro de Jesucristo con sus propios rasgos físicos.
Asimismo, llama la atención que el cuerpo del Hijo de Dios se encuentra en avanzado estado de descomposición, por lo que varios insectos, entre ellos varios escarabajos y moscas, emanan de los poros abiertos del torso y de las heridas de la cara de Cristo.
Otra de las grandes diferencias de la «Piedad» de Fabre frente a la de Miguel Ángel es que en la obra del escultor belga Cristo sostiene con su mano derecha un cerebro.
«Son las neuronas las que hacen sentir el sentimiento de la compasión y por eso he representado el cerebro, del que todo depende, incluso el alma del individuo» , ha precisado Fabre en varias entrevistas.
Este órgano es un «leimotiv» en la carrera del escultor flamenco, ya que ha sido el eje centrar de muchas de sus exposiciones, entre ellas las de «Antropología de un Planeta» y «Desde los pies al cerebro» , que en 2007 y 2009, respectivamente, sorprendieron al gran público en Venecia.
El artista explica que ha trabajado durante dos años hasta terminar la obra «Sueño Compasivo» y asegura que el mármol utilizado para su creación ha sido extraído del santuario de Carrara, el mismo lugar del que extrajo el preciado material Miguel Ángel hace más de cinco siglos.
Además de esta copia de la «Piedad» del italiano, la exposición contará con otras cuatro esculturas más, que estarán colocadas sobre una peana dorada a la que será posible acceder después de cambiar el calzado de calle por unas zapatillas especiales que la organización distribuirá a lo largo de la muestra.
«A los espectadores se les consentirá subir sobre la peana-escenario y convertirse así en actores cercanos a las cinco esculturas blancas, cuyos temas basados en la vida, la muerta y la resurrección se unen a la reflexión sobre la eterna metamorfosis» , apuntan los organizadores.
A través de la muestra, que termina con la visita a la reinterpretación de la «Piedad» de Miguel Ángel, el artista pretende ofrecer al público la posibilidad de «concentrar su atención en el cuerpo como punto de cristalización entre la vida, la muerte y la resurrección, con el insecto como símbolo de la metamorfosis y el cerebro como sede del pensamiento» , sentencia la organización.
Agencia El Universal