
El rancho del Sol, donde se realizó el enfrentamiento del 22 de mayo con saldo de 43 muertos, es de lujo: con casa principal, alberta, frontón, palpa, jardín de juegos infantiles, jacuzzi y bodegas.
Así lo constató la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y todavía encontró «maquinaria agrícola humeante», informó en un boletín este miércoles para sustentar declaraciones de su presidente, Luis Raúl González Pérez.
Este aseguró que «no descarta ninguna línea de investigación en relación a posibles violaciones a los derechos humanos».
A continuación el boletín:
El Ombudsman nacional, Luis Raúl González Pérez, señaló que en la integración del expediente del caso Tanhuato, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos no descarta ninguna línea de investigación en relación a posibles violaciones a los derechos humanos.
Pidió que no se especule en torno a esta investigación, pues dijo que la CNDH recaba todos los indicios y se entrevistará con las personas detenidas.
Como ha sido público, resaltó, desde el momento en que tuvimos noticia de los hechos, ha habido personal de la Comisión en el lugar para recabar información. Ahora mismo se encuentra ahí el Primer Visitador General, Ismael Eslava Pérez, llevando a cabo diversas actuaciones en el Rancho del Sol.
En tanto, en Michoacán, esta Comisión Nacional continúa con la investigación sobre los hechos ocurridos en el
límite de los municipios de Ecuandureo y Tanhuato, el pasado 22 de mayo.
En este sentido, la CNDH desarrolló hoy diversas diligencias sobre el caso en el lugar de los hechos, el Rancho del Sol, por conducto de visitadores adjuntos, criminalistas, abogados y personal de su Oficina Foránea en Morelia, además de médicos forenses. Todos ellos bajo la coordinación del Primer Visitador General.
El personal actuante de este Organismo Nacional se concentró en el kilómetro 370 de la carretera Morelia-Guadalajara, para llevar a cabo la observación e inspección del lugar de los hechos, estando presente personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán y de la Fuerza Ciudadana Policial, que resguarda el predio y sus instalaciones.
Realizó asimismo un minucioso recorrido que incluyó las distintas parcelas en que está dividido el rancho, así como la casa principal, alberca, frontón, palapa, jardín con juegos infantiles, jacuzzi y bodegas, en una de las cuales aún había maquinaria agrícola humeante.