Comedores comunitarios…alientan la convivencia infantil

En los comedores comunitarios de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, además de encontrar comida caliente dos veces al día, muchos niños han hecho amigos.

No se conocían y hoy son amigos inseparables.

En la esquina de las calles Calendario Azteca y Monte Albán, aquí en la Congregación de Vargas, está uno de los 262 comedores comunitarios que funcionarán hacia finales del presente año en el estado de Veracruz. Aquí estuvo el miércoles 18 de junio la Secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, quien testimonió cómo se proporciona el servicio.

Este comedor sirve diariamente dos comidas calientes a 120 personas, entre mujeres embarazadas o en lactancia, adultos mayores y, especialmente, niñas y niños como Britania, Mayumi, Néstor Daniel y Brian, quienes hasta hace unos días ni siquiera se conocían.

Durante la visita de la Secretaria Robles Berlanga al comedor de esta comunidad rural, Britania, una niña trigueña, de ojos claros, con 11 años de edad y fácil de palabra, dijo que “aquí todos somos pobres, pero hay algunos más pobres que nosotros”.

Junto a ella está Brian, de nueve años, «el más latoso y pone apodos a todos», afirman Mayumi y Néstor Daniel, de 8 y 9 años, quienes se conocieron después de haberse instalado el comedor. “Aquí nos hicimos cuates y jugamos a las escondidas y a los encantados después de comer.

Néstor Daniel dice mientras clava la mirada de sus negros ojos en las ollas donde se cuecen los alimentos, que los niños pueden venir a comer diario al salir de la escuela, pero aprovechan para quedarse a jugar con sus nuevos amigos.

Afuera se escucha el canto de un pájaro y Mayumi lo identifica pronto: «es un pecho amarillo, pero aquí también hay pájaros carpinteros y cardenales».

En la fecha de la visita de la Secretaria Rosario Robles, los nuevos amigos comieron machaca con atún, frijoles, tortillas y agua de tamarindo, refiere la cocinera Sara Celia Ochoa, de 56 años, quien vino a sentarse entre los niños para darse un respiro. Ella coordina a las 20 mujeres que trabajan en el comedor comunitario en la preparación de los alimentos, para servirlos dos veces al día a 120 personas.

«Diariamente hacemos el menú con carne de soya, atún, chilorio, arroz, frijol, leche en polvo, leche, huevo, frutas, legumbres y otros alimentos que surte Diconsa», menciona.

Britania interrumpe y afirma que es bueno que les den de comer a los niños como ellos, “pero lo que más nos alegra es que cada vez somos más amigos, aunque unos como Brian nos hace enojar con sus travesuras y los apodos que nos pone… pero lo aguantamos porque también es nuestro amigo”.

En una primera etapa, la Cruzada Nacional Contra el Hambre instaló 45 comedores comunitarios en los municipios de Veracruz, La Perla, Mixtla de Altamirano, Zontecomatlán, Soteapan, Soledad Atzompa, Tehuipango, Chicontepec, Álamo Temapache, Minatitlán, Tuxpan, Coatzacoalcos y Acayucan, atendidos por la estrategia ordenada por el Presidente Enrique Peña Nieto; en ellos se atiende a más de cinco mil 400 personas en la entidad, con dos comidas calientes al día.

Hacia finales de año, la meta es tener 262 comedores comunitarios en Veracruz, para garantizar alimentación nutritiva a de más de 31 mil veracruzanos en pobreza extrema.