
Drew Barrymore presenta por primera vez a su segunda hija, Frankie, en la portada de la edición de People de esta semana, en la que confiesa que le ha sido difícil combinar el cuidado de sus dos pequeñas con su carrera -según nota de People en Español-.
La actriz, quien dio a luz su segundo retoño con el asesor de arte Will Kopelman el 22 de abril, asegura en la entrevista con la revista que la recuperación tras este parte ha sido más rápida que cuando tuvo a su primera hija Olive, de 20 meses.
«Sé que tengo dos niñas que cuidar ahora y me he puesto las pilas para ajustarme a los cambios de inmediato», afirma Barrymore, para la que el reto más grande ha sido cómo dividir su tiempo. «Están despiertas y dormidas a distintas horas, o despiertas a la vez, y tengo que hacer un poco de malabares».
Barrymore, de 39 años, dice que su turbulenta niñez ha influenciado lo que considera que debe ser más importante en la vida de sus niñas.
Entre otras cosas, admite que quería que Olive tuviese un hermano «porque me hubiera gustado tener uno en mi vida» y también quiere «estar en un lugar cuando diga que voy a estar allí. Crear un hogar estable. Sé que cuando mi hija quiere mecerse en el columpio con más fuerza, o meterse en la piscina y todas esas cosas, se siente segura. Para mí lo más importante es que los niños se sientan seguros».
La coprotagionista de Los ángeles de Charlie dice que Olive está encantada de tener una hermanita. «Olive ama a Frankie y quiere estar con ella todo el tiempo. Quiere darle de comer. Está superinvolucrada, por ahora. Seguramente las cosas tendrán su ir y venir», agrega.
Barrymore se encuentra en la actualidad en plena promoción de su nueva comedia con Adam Sandler, Blended, que se estrena este viernes. Respecto a su carrera, la actriz admite que no estaba segura de si quería actuar tras el nacimiento de Olive.
«Honestamente, no pensé que podría volver a actuar. No quería estar alejada de mis hijas. Sencillamente no era prioridad», reconoce. «Con Adam me siento segura porque él crea un ambiente en el cual los hijos pueden venir y convivir. Fue una lección muy grande para mí».
La actriz, sin embargo, sabía que las exigencias de su trabajo estarían tocando a su puerta al poco tiempo de dar a luz. Barrymore dice que Sandler «la mantuvo presente y afinada» durante la filmación.
Tener un nuevo proyecto la ayudó a cuidar su físico tras dar a luz, pero a nivel mental aún no se ha recuperado. «Cuando entro a una habitación para buscar algo, ya se me ha olvidado a lo que venía», señala la actriz como ejemplo de su estado actual.