ACAPULCO. El PRI afirmó que su dirigencia nacional, el comité estatal en Guerrero y su candidato Manuel Añorve son ajenos a la agresión que sufrió la noche del martes Guillermo Sánchez Nava, representante del PRD ante el órgano electoral, por presuntos simpatizantes del tricolor en Chilpancingo.
En respuesta a la petición que la víspera realizó el líder perredista Jesús Ortega, para que el tricolor colabore en las investigaciones, Beatriz Paredes señaló que carecía de elementos para “convalidar que fueron brigadistas afines al PRI los responsables”.
Dijo que la procuración de justicia en Guerrero está en manos de un gobierno emanado del PRD, por lo que confió en que la autoridad correspondiente investigue éste y todos los incidentes suscitados en el proceso electoral.
Según el parte médico que ofreció anoche vía telefónica el neurocirujano Rodolfo Ondarza —quien encabeza la atención en el hospital Ángeles del Pedregal, en la ciudad de México—, Sánchez Nava se mantiene grave, bajo supervisión intensiva. “Aunque hay mejoría, sigue en estado de estupor, y la posibilidad de muerte no se supera”.
En Acapulco, el ex diputado local priísta Ernesto Vélez Memije —miembro de la campaña de Añorve— denunció que su correligionario, el diputado federal y ex edil de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, le pidió mentir y decir que conocía a los agresores.
Consideró que la información que ha surgido de que un grupo de jóvenes agredió a Sánchez Nava es parte de las acciones bélicas que ha mantenido el PRD como parte de la guerra sucia en las campañas políticas.
Vélez Memije había declarado a los medios de comunicación en Chilpancingo que fue testigo de la agresión que sufrió el representante electoral. Ante esas declaraciones, Jesús Zambrano, coordinador general de la campaña del perredista Ángel Aguirre y el hombre más cercado a Jesús Ortega, pidió a la ciudadanía que proporcionara información sobre los agresores; incluso exigió a la Procuraduría de Justicia que los presentara e investigara a fondo.
El candidato del PAN, Marcos Efrén Parra Gómez, también hizo un llamado a las autoridades para que presentara a los jóvenes que agredieron al político.
Pero Ernesto Vélez Memije ayer dijo sentirse apenado por la magnitud que tomaron las falsas declaraciones que dio y aclaró que lo hizo porque se lo pidió el ex alcalde de Chilpancingo y diputado federal, Mario Moreno debido a los compromisos que ambos tienen.
El diputado federal Porfirio Muñoz Ledo (PT) llamó a la izquierda de Guerrero a estar en alerta, “porque las cosas se van a poner muy mal”.
De gira por Guerrero, calificó de grave que regresen los métodos del PRI, “el PRI bravucón que no le gusta perder”. En conferencia de prensa, lamentó la agresión, pues los agresores le tiraron a matar y que éstos se fueron cuando creían que ya estaba muerto.
Agencia El Universal