El sistema político mexicano está muy retrasado y debe dar un salto con su ingreso a la democracia participativa, afirma el ex ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juventino Castro y Castro, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados.
El legislador federal señala que incluir en la Constitución las figuras de consulta popular, plebiscito, referéndum, revocación de mandato e iniciativa popular marcaría un cambio histórico en el país.
Tales instrumentos de participación ciudadana darían a la sociedad la capacidad de intervenir en las cuestiones públicas, reservadas por ahora a los políticos, asegura en entrevista el abogado.
Cambiar o no la Constitución, poner en vigor o no una ley emanada del Congreso de la Unión, destituir gobernantes son decisiones posibles con esos instrumentos de participación ciudadana que otorgarían poder al pueblo en el sistema político, afirma el ex ministro de la SCJN.
Castro y Castro es diputado federal y forma parte de la bancada del Partido de la Revolución Democrática, a la cual representó en la elebración del Centenario de la Revolución en la sesión solemne, en la que explicó por qué el mexicano contemporáneo está alejado de la vida pública.
El pueblo, dijo en esa ocasión, se niega a participar en los asuntos públicos, en los que se ocupan los políticos, dado que desprecia esta esfera, que le es ajena.
¿Es posible realizar la gran reforma de la democracia participativa?
Son tiempos complicados. Los dos tercios necesarios para modificar la Constitución en el Congreso de la Unión solamente se reúnen con los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN). El PRD puede influir.
Además, la clase política ya está en tareas de proselitismo por el 2012.
Así parece. El año que entra será de campaña proselitista y, por supuesto, 2012 será un año de elección y de pleitos por los resultados.
En esa perspectiva, ¿qué puede aportar la Cámara de Diputados ahora?
Yo tengo mucha esperanza en la democracia participativa. Si solamente sacáramos ese tema, la 61 Legislatura sería histórica, porque se trata de un parteaguas.
¿En qué orden se deben ir dando los instrumentos de la democracia participativa?
Debe ser el paquete completo: consulta popular, porque sólo así puede participar el pueblo; por supuesto, plebiscito, referéndum, revocación de mandato, que es muy importante, y la iniciativa popular, entre otras.
Paquete completo
El presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, ¿plantea solo una propuesta parcial?
En el dictamen de la Comisión de Puntos Constitucionales de San Lázaro se resumen, sin embargo, todas las posiciones que se han presentado en iniciativas y saldría el paquete completo.
¿En el PRD están abiertos a las aportaciones?
Sí. Es más, estamos por realizar un foro con los principales juristas de México para que opinen y den consistencia a un dictamen final.
¿Qué opciones de participación tendría la gente?
En consulta popular, en plebiscito que casi siempre es: “Se cambia la Constitución o no. Una nueva o no”. Referéndum, son ciertas leyes que, después del Congreso de la Unión, las tendría que aprobar el pueblo. Revocación de mandato, que es mucho muy importante, pues nosotros tenemos el nombramiento del representante de la administración federal, pero no la revocación. El pueblo, la ciudadanía, otorga su poder soberano y no puede retirarlo a quien eligió.
¿Esto metería a la gente en la cuestión pública?
Claro, al darle a la sociedad la capacidad de intervenir, en lo que (hasta ahora) es cuestión política de los políticos. La política del pueblo se da en la medida en que afirma: “Yo quiero esto, yo quiero lo otro, rechazo esto y lo de más allá”, y va rectificando un rumbo. “Lo que parece tan difícil es sencillísimo: preguntarle al pueblo”.
¿Eso es sumar a la gente en lo público?
Es el pueblo en la plaza pública, como en su origen, los romanos. He aquí a los senadores que dicen: “Esta ley queremos que salga, ¿cómo opinan ustedes?” Es muy bonito y muy fundamental, porque con la actual democracia representativa, el pueblo tiene la impresión de que cuando elige un representante, le otorga el poder y deja de ser soberano y cuando los servidores públicos obran o actúan en contra del pueblo, éste se queda callado.
¿Significa una reforma política?
Se trata de una de las propuestas más completas. Estamos muy atrasados en cuestión política y es desde aquí, desde la Cámara de Diputados, de donde se puede lanzar esta iniciativa, ese cambio a fondo en el sistema político. Este lugar es de grandes decisiones, donde se pueden resolver cosas tan importantes como esta.
Agencia El Universal