Electorado latino podría jugar un papel decisivo el 8 de noviembre

El nivel de participación de votantes latinos en la fase de voto temprano en estados como Florida, Nevada y Colorado apuntaló las proyecciones de que el electorado latino podría jugar un papel decisivo en las elecciones del 8 de noviembre.

Casi 15 millones de latinos podrían votar en las elecciones y su poder político será más decisivo en ese puñado de estados porque se trata de entidades “columpio”, que pueden inclinarse en favor de demócratas o republicanos y ser definitorias en el desenlace nacional.

Un nuevo sondeo de Latino Decisions incrementó su proyección original de participación latina en los comicios de 13.1 millones a 14.7 millones, con un 79 por ciento a favor de Hillary Clinton y sólo 18 por ciento a favor de Donald Trump a nivel nacional.

Estadísticas preliminares confirman un incremento del nivel de entusiasmo para Clinton entre los electores latinos, un fenómeno que podría compensar el menor nivel de afluencia a las urnas de los electores afroamericanos, al menos en algunos estados.

En Florida, donde los latinos representan el 17 por ciento de los electores del estado, más de 133 mil latinos habían depositado su voto hasta la semana pasada, un aumento de 100 por ciento en relación con el mismo lapso en 2012, de acuerdo con cifras de la campaña presidencial demócrata.

A favor de Clinton opera el hecho de que los latinos de Florida que se inclinan por los demócratas (puertorriqueños, mexicanos y otros) son una mayor proporción del electorado (68 por ciento), que los cubanoamericanos (31 por ciento) que suelen apoyar a los republicanos.

Al igual que en el 2000, cuando George W. Bush derrotó a Albert Gore por 537 votos en Florida a pesar de haber perdido el voto popular, el estado regresa al mapa electoral como potencialmente el más decisivo para definir las elecciones del 2016 y el voto latino podría ser clave.

Sin un triunfo en Florida, con sus 29 votos electorales, las probabilidades de un triunfo de Donald Trump en el Colegio Electoral son mínimas.

Hasta antes del inicio del voto temprano Clinton lo aventajaba en el estado con 40 puntos porcentuales en el apoyo del voto hispano.

Entre los indicadores más favorables para Clinton figura el hecho de que los dos condados más sólidamente demócratas, Miami-Dade y Osceola, rebasaron el promedio estatal de participación en el voto temprano o voto por correo, de acuerdo con el sitio FiveThirtyEight.

En su contra opera sin embargo un incremento similar de la participación de republicanos en los ocho condados con mayor aumento de votantes tempranos, aunque un nuevo sondeo sugirió que un 28 por ciento de los conservadores están votando por ella.

En Nevada, donde el 17 por ciento de los latinos elegibles son de origen latino, primordialmente mexicano, Clinton aventaja a Trump por un par de puntos porcentuales, por lo que una alta participación latina podría frustrar la estrategia de Trump de avanzar en otro estado clave.

Hasta ayer más de 340 mil votantes del estado habían participado en el proceso de voto temprano, de los cuales 151 mil eran demócratas, o 30 mil más que los republicanos, aunque expertos coinciden que el estado sigue siendo competitivo y difícil de medir la intención del voto.

Sin embargo, la campaña de Clinton recibió buenas noticias en el condado de Clark, uno de los mayores centros demográficos de Nevada con un 31 por ciento de población latina. Los votantes demócratas aventajan a los republicanos por 13 puntos porcentuales, aunque se desconoce la distribución del voto.

En Colorado, donde el 15 por ciento de la población elegible para votar es latina, equivalente a más de 555 mil votantes, más demócratas han votado en el proceso de voto temprano que republicanos.

En total han votado más de un millón de los 3.27 millones de votantes registrados.

Obama derrotó a Mitt Romney en Colorado en las elecciones del 2012 y Clinton busca repetir la victoria para contabilizar los nueve votos electorales del estado, en parte con el apoyo de los electores latinos.

A nivel nacional, del total de 27.3 millones de latinos elegibles para votar, equivalentes al 11.9 por ciento del total nacional, se espera que un poco más de la mitad acuda a las urnas.

Expertos coinciden que un candidato presidencial requiere obtener alrededor del 40 por ciento del voto latino para ser competitivo a nivel nacional, aunque esa fórmula podría desdibujarse con un incremento inesperado de electores blancos que no suelen votar periódicamente.

En 2012, Obama no sólo ganó los estados tradicionalmente demócratas, sino también estados “columpio” de Florida, Colorado, Nevada, Ohio y Virginia, por lo que arrasó a Romney con 332 votos electorales contra apenas 206.

Por comparación, en 2008 Obama y su compañero Joe Biden obtuvieron el 67 por ciento del voto hispanos contra 31 por ciento para John McCain y Sarah Palin.

McCain fue un vocal partidario de una iniciativa de ley de reforma migratoria para legalizar a millones de indocumentados.

Al igual que en 2012, Obama ganó en 2008 Florida, Colorado, Nevada, Virginia, y Ohio, con lo que totalizó 365 votos electorales contra 173 de los republicanos. El entonces candidato demócrata había prometido a los latinos promover una reforma migratoria en su primer año de gobierno.

Una encuesta del Centro Pew mostró antes del inicio del voto temprano que los latinos tenían menos intención de votar en 2016 que en 2012, pero las cifras del voto temprano sugieren preliminarmente que el voto latino anti-Trump podría alterar las proyección originales, al menos en algunos estados clave.

inf./Notimex