•Enojos y conflictos en el sector turístico nacional
•El mal trato de Ruiz Massieu con López Negrete
•Y el gran apoyo de Peña Nieto para su secretaria
A Claudia Ruiz Massieu le ha costado mucho deshacerse de una carga.
Va la historia:
Cuando llegó a la Secretaría de Turismo (Sectur) por encargo de Enrique Peña Nieto, se encontró con una situación anómala.
Su antecesora Gloria Guevara, miembro del gabinete de Felipe Calderón, tenía el doble cargo de titular del ramo y de directora general del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), brazo operativo y presupuestario del sector.
La política guerrerense estudió el organigrama y decidió no asumir la segunda función.
En lugar de acaparar posiciones, optó por delegar funciones y en enero anunció la designación del empresario sinaloense Rodolfo López Negrete Coppel al frente del Consejo, quien tenía el cargo de director adjunto con Guevara.
Lo ascendió.
Pero las cosas no han funcionado, no avanzan.
Como responsable de los tianguis turísticos y otros eventos nacionales y extranjeros, López Negrete Coppel actúa de manera independiente y maneja los recursos del CPTM de acuerdo con lineamientos propios.
Una bicoca: más de mil 600 millones de pesos anuales, mayoritariamente fruto de cobros aplicados a visitantes no inmigrantes.
El Consejo se queda con 60 por ciento de ese impuesto y el 40 por ciento restante va a gastos del Instituto Nacional de Migración (INM).
PEÑA RATIFICA SU CONFIANZA A RUIZ MASSIEU
Los gobiernos panistas ignoraron un principio: las desobediencias en política son imperdonables.
Muestran debilidad de los secretarios de Estado y el resultado son un desorden generalizado.
Por algo el equipo de Vicente Fox fue bautizado como gabinete Montesori, pues él tomaba una decisión y ninguno de sus colaboradores cumplía sus instrucciones.
También sucedió con Felipe Calderón.
Un ejemplo: el director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Enrique Carrillo Lavat, acudió sólo una vez con la secretaria Gloria Guevara.
Claudia Ruiz Massieu no quiere prolongar esa situación.
Rodolfo López Negrete Coppel no la obedece como a ella le gusta, maneja el presupuesto a su gusto y desde el sexenio pasado no firma convenios para el manejo de campañas.
Estas y otras anomalías han molestado a Ruiz Massieu, quien cansada en días pasados habría acudido con el presidente Enrique Peña Nieto para informarle y decidir qué hacer con López Negrete Coppel.
-Haz lo que tengas que hacer –le han dicho.
Está inconforme con López Negrete Coopel no tanto para deshacerse de una herencia calderonista, sino para tomar el control del Consejo y su gran bolsa.
Ruiz Massieu quiere a uno muy cercano.
O al menos tan leal como Héctor Gómez Barraza, quien trata de recuperar para Fonatur su función de impulsor de polos turísticos y no simple vendedor de terrenos propiedad de la nación para la especulación privada.
SIGUIENTE RETO: ACLARAR MIL 600 MILLONES
1.- El Consejo de Promoción Turística de México y su presupuesto están bajo vigilancia.
La afluencia turística se desplomó en el sexenio pasado, como ha señalado la propia secretaria, y se busca que las cuentas de las auditorías cuadren.
El Consejo trabaja con estructura pequeña y por ello contrata empresas de publicidad mediante concursos públicos, la mayoría de los cuales venció en febrero pasado.
No ha lanzado convocatorias y Rodolfo López Negrete Coppel, quien ayer se encontraba en Cancún, deberá informar por qué esa inoperancia.
No es un tema menor: se trata del llamado primo rico de Sectur.
Y 2.- el crecimiento de la población no debiera ser argumento para la multiplicación de los pobres y de la marginación.
El estado de México, el de más habitantes del país, ha registrado mejoría en el nivel de vida, de acuerdo a las cifras del Coneval.
Ayer las reproducía el gobernador Eruviel Avila: la pobreza extrema disminuyó 2.8 por ciento, el rezago educativo 3.1, la carencia de acceso a la salud 5.4 puntos y la carencia de acceso a la alimentación cayó de 31.6 a 17.7 por ciento.