Washington.- El Departamento de Estado de Estados Unidos preguntó a su embajada en Buenos Aires si la presidenta argentina, Cristina Fernández, «toma alguna medicación» y cómo dividía el trabajo con su marido, el recientemente fallecido Néstor Kirchner, según documentos filtrados por Wikileaks.
«¿En qué materias toma CFK (iniciales de Cristina Fernández de Kirchner) las decisiones y cuáles deja a Néstor Kirchner?», afirma el documento de la Oficina de Operaciones de Inteligencia del Departamento de Estado de Estados Unidos, identificada en el documento como INR/OPS.
Los extractos del documento aparecen publicados hoy por el diario español El País en su versión digital, uno de los cinco medios que han tenido acceso a previo a los más de 250 mil documentos de divulgados por Wikileaks, que sacan a la luz cables y documentos internos de la diplomacia estadounidense.
La pregunta forma parte de un «perfil» sobre la presidenta argentina remitido a finales de 2009 a la embajada en Buenos Aires organizado bajo los epígrafes de «estado mental y salud», «su visión política» y «su forma de trabajo».
«Toma alguna medicación? ¿En qué circunstancias controla ella mejor el estrés? ¿Cómo le afectan las emociones en su proceso de toma de decisiones y cómo baja la tensión cuando está angustiada?», son otras de las cuestiones formuladas.
El Departamento de Estado de Estados Unidos quería indagar en «la dinámica interpersonal en el tándem gubernamental», tras explicar que tienen «un conocimiento más sólido sobre el estilo y la personalidad de Néstor Kirchner que sobre Cristina Fernández de Kirchner».
«Nos gustaría ampliar la visión sobre la personalidad de CFK», matiza el informe.
La mayoría de los cables diplomáticos de la INR/OPS se refieren a los Kirchner como la «pareja gobernante» (ruling couple) o Primera Pareja (First Couple), señala el diario El País.
En el plano político, la abundante correspondencia entre la embajada en Buenos Aires y Washington critica «la ineptitud de los Kirchner para la política exterior» y «su intolerancia a la hora de recibir críticas».
En otro informe, se expone con claridad el rol que Washington espera que tenga Argentina en el continente.
«Esperamos que Argentina desempeñe un papel positivo en evitar un conflicto y llevar a buen puerto la democracia en Bolivia; que influya en el presidente ecuatoriano Rafael Correa para que se comporte con más moderación» , dicen los documentos.
Y «que tome una posición más constructiva, madura y equilibrada en el conflicto colombiano y que influya positivamente en su contraparte venezolana», agrega.
Asimismo, los informes filtrados por Wikileaks, revelan que el gobierno argentino mantenía mejores relaciones con la Administración Bush y su secretario Adjunto para América, Thomas Shannon, que con su sucesor, Arturo Valenzuela.
Por otro lado, desde la legación diplomática se recalca el deseo de Cristina Fernández de «asociarse» con el presidente estadounidense, Barack Obama.
«La intensidad de ese deseo abre oportunidades para nosotros», argumenta el diplomático que firma el telegrama desde Buenos Aires.
De hecho, Cristina Fernández se queja ante miembros de la embajada de Estados Unidos, en un encuentro con congresistas de ese país de visita en Argentina, de no haber podido entrevistarse con Obama.
«CFK dice que es difícil entender por qué el presidente Lula ha obtenido una entrevista con Obama, pese a que Brasil ha votado en contra en la Agencia de Energía Atómica y a la reunión de Lula con Ahmadineyad, mientras que se le niega la entrevista a ella, que mantiene una fuerte posición contra Irán en la IAEA y en la lucha contra el terrorismo», reporta la embajada.
No obstante, las relaciones entre Argentina y Estados Unidos parecen recuperar el buen ambiente tras la reunión «cálida y amplia» entre Cristina Fernández y la secretaria de Estado, Hillary Clinton en febrero, preámbulo del encuentro entre la presidenta argentina y Barack Obama, en marzo de este año en Washington.
Agencia El Universal