Más de 100.000 personas se han manifestado a última hora de la tarde de este miércoles en decenas de ciudades francesas para condenar el atentado contra el semanario satírico Charlie Hebdo y en defensa de la libertad de expresión. La mayoría de las protestas fueron espontáneas y en ellas se exhibieron miles de pancartas con la frase “Je suis Charlie” (“Yo soy Charlie”), unas palabras igualmente coreadas por los manifestantes. Para el próximo sábado, está prevista una gran protesta en París convocada por cinco partidos de izquierda a primera hora de la tarde.
El acto más numeroso de este miércoles, en este caso convocado por el sindicato de periodistas franceses, se registró en la plaza de la República, en la capital francesa, donde se reunieron alrededor de 35.000 personas. Buena parte de la concentración de celebró en silencio, aunque finalmente se produjeron numerosos gritos de “Charlie, Charlie”, “Somos Charlie” y “Libertad de expresión”. Un gran luminoso con las palabras “Not Afraid» (Sin miedo) fue exhibido entre la multitud.
La segunda protesta más numerosa se celebró en Lyon, donde entre 10.000 y 15.000 personas siguieron la concentración en un tenso silencio y con escasas pancartas. Similar cifra de manifestantes hubo en Rennes o Toulouse. En esta ciudad, donde la presencia de exiliados españoles republicanos fue muy numerosa, a los gritos de “Je suis Charlie», también se unió alguno de “No pasarán”. Protestas igualmente numerosas se produjeron en Lille, Marsella, Perpiñán, Rouen, Grenoble, Gap o Bergerac. Según las crónicas recogidas en algunas de estas ciudades, el silencio era tan emotivo como impresionante.
Mientras tanto, varios centenares de personas se concentraban ante la sede de la Embajada francesa en España, junto a la puerta de Alcalá, en un acto de repulsa por el atentado contra la publicación Charlie Hebdo en París, informa Pilar Álvarez desde Madrid.
“Todos somos Charlie” corearon varias veces alrededor del embajador francés en España, Jérôme Bonnafont, que recibió en el mismo lugar el respaldo de representantes del Gobierno español y de los principales portavoces políticos, además del de asociaciones de periodistas y de ciudadanos. El embajador agradeció el apoyo “de corazón” y destacó que este tipo de muestras son importantes “para defender la libertad y decir que este ataque es un ataque contra todos”.
El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, que acudió al acto en representación del Gobierno ha señalado que los españoles comparten el dolor por “este crimen espantoso” y mostró su solidaridad también con los medios de comunicación.
El líder de los socialistas, Pedro Sánchez, acompañado del ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero y de otros representantes del PSOE subrayó que “la religión musulmana no es lo mismo que el yihadismo” y que los valores de libertad de expresión “van a permanecer”.