Entre cero y tres por ciento bajaría el precio de la gasolina en la primera semana del 2016, es decir, 40 o 50 centavos, tras la aprobación de la liberación de los combustibles fósiles incluidos en el proyecto de decreto de la Miscelánea Fiscal y Ley de Ingresos 2016.
Aunque no bajará en la misma proporción que el petróleo respecto al mercado internacional, es un hecho que con la liberalización a los combustibles hasta el 2018, las gasolinas no subirán su precio, aseguró el diputado del PRI Jorge Estefan Chidiac.
Acompañado de su correligionario, Jericó Abramo Masso, el secretario de la Comisión de Hacienda y Crédito Público explicó que la única manera que el precio de la gasolina y diésel aumentará sería si también lo hace el mercado del petróleo a 80 o cien dólares el precio del barril.
“Si baja mucho el petróleo no va a bajar más de tres por ciento la gasolina. Si se queda el petróleo como está, va a bajar uno o dos por ciento, pero va a bajar algunos centavos, no pesos”, aclaró el legislador también secretario de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública.
Para poder preparar a la competencia a las diferentes empresas que van a participar en el mercado, el Senado de la República modificó que a partir de enero de 2016, se podría mover el precio dentro de una banda de flotación.
En la Ley de Ingresos que se envió al Ejecutivo federal este jueves, aprobado en lo general por todos los partidos políticos a excepción de Morena, se estableció una redacción que permitía garantizar que la Secretaría de Hacienda tendría que establecer una banda para estos precios.
Estefan Chidiac abundó que con ello se tiene garantizado que cuando en Estados Unidos se eleve el precio del petróleo a 80 o cien dólares, la gasolina va a valer 20 pesos en ese país y 14.50 en México.
“Eso es lo que no ha quedado claro, hoy que el petróleo está barato, pero con un tipo de cambio de 16.50, si subiera el petróleo a niveles de 60, 70, 80 dólares, ya estaría más barata la gasolina en México que en Estados Unidos y en ese momento sólo subiría tres por ciento de acuerdo a la banda que pusimos”, precisó el legislador de Puebla.
¿Por qué más menos tres por ciento?
Porque si en los criterios generales de política económica para el 2016 se establece que la inflación esperada será del tres por ciento, si hubiera un cambio abrupto en el precio de los combustibles que hoy los mercados no esperan, la gasolina no podría subir más que la inflación, continuó.
Al establecer un candado en caso de un movimiento abrupto en el precio de los combustibles fósiles, en especial el petróleo, Estefan Chidiac explicó que no hay manera de que el Gobierno de la República ajuste el precio y que en ese sentido se mantenga en términos reales el mismo precio.
INF./TELEFONO ROJO/QUADRATIN