Greenpeace pidió disculpas el miércoles por cualquier «ofensa moral» causado luego de instalar un cartel en las antiguas Líneas de Nasca en Perú.
«Greenpeace pide disculpas sin reservas al pueblo de Perú por la ofensa causada… lo sentimos profundamente», aseguró la organización en un comunicado, donde anunciaron que el propio director ejecutivo internacional, Kumi Naidoo, viajará esta semana a Lima para disculparse personalmente con las autoridades peruanas.
Activistas de la organización instalaron una pancarta junto al milenario colibrí, tallado hace más de 1.500 años con el fin de llamar la atención, en el marco de la Conferencia de Cambio Climático de la ONU (COP20), que se realiza esta semana en Lima.
Sin embargo, el gobierno peruano a través de un comunicado del Ministerio de la Cultura aseguró que la intervención del grupo ambientalista fue «ilegal, inconsulta y premeditada» y que produjo «una grave afectación del área».
«La protesta pacífica de Greenpeace en el área de las Líneas de Nasca quiso demostrar el impacto del cambio climático y honrar el legado histórico de este pueblo que aprendió a vivir con el medio ambiente sin afectarlo», dijo Henry Carhuatocto, asesor legal de Greenpeace en Perú.
Las visitas al sitio son estrechamente supervisadas. Incluso ministros y presidentes deben contar con permiso -y calzado- especial para pisar el frágil suelo donde se cortan las líneas de 1.500 años de antigüedad.
Reunión con el gobierno
Según el comunicado de Greenpeace, el grupo se reunió con funcionarios del Ministerio de Cultura «para ofrecer una disculpa».
«Estamos plenamente conscientes de que esto se ve mal. En lugar de transmitir un mensaje urgente de esperanza a los líderes de la ONU reunidos en las conversaciones sobre cambio climático en Lima, nos mostramos descuidados y groseros», aseguró el grupo.
«Vamos a cooperar plenamente con cualquier investigación», aseguraron.
Disculpas no aceptadas
Sin embargo, el gobierno peruano tiene otra versión de la reunión.
«No hemos aceptado las disculpas. Ellos no aceptan el daño ocasionado», comentó el viceministro de Cultura, Luis Jaime Castillo a los medios locales, tras recibir a los representantes de Greenpeace