En la víspera de este negro aniversario – el director ejecutivo de Greenpeace Japón, Junichi Sato, llamó a no olvidar a las víctimas y a dejar atrás el uso de energía nuclear.
«El primer ministro Abe y la industria nuclear tienen la esperanza de que el pueblo japonés y el mundo se olvide de las víctimas y de las terribles lecciones de Fukushima a fin de que puedan reanudar los viejos reactores en riesgo y que el resto del mundo compre la tecnología nuclear japonesa. De lo que deberíamos olvidarnos es de depender de un sistema de energía basado en tecnologías viejas, sucias y peligrosas como los combustibles fósiles y la energía nuclear.
El operador de la planta de TEPCO y el gobierno de Abe en Fukushima no solo han fracasado en mantener el desastre nuclear bajo control, también le han fallado a las víctimas del desastre y el pueblo japonés. Las víctimas de Fukushima siguen sufriendo y luchando por la compensación para seguir adelante con sus vidas.
Greenpeace envió recientemente una delegación internacional con representantes de Corea, la India, Polonia, Francia y Alemania a Fukushima para reunirse con algunas de las víctimas y testigos de la situación sobre el terreno, tres años después de la catástrofe.
Una de las víctimas, el ex productor de leche Itiate, Kenichi Hasegawa, dijo a nuestra delegación: «Mi patria está destruida . Yo soy un agricultor que no puede cosechar. No puedo describir lo que hemos perdido en este desastre. Uno tiene que recordar que la energía nuclear es lo más terrible. No deberíamos estar manteniendo esta cosa sucia para la próxima generación”
“El gobierno del ministro Abe está atrapado en el siglo pasado, mientras que el resto del mundo se está moviendo hacia adelante», dijo Sato,
Greenpeace no permitirá que las lecciones de este desastre sea olvido y está exigiendo el fin de la era del riesgo nuclear y un futuro de la energía verdaderamente limpia, segura y renovable.