Haití aún clama por ayuda

PUERTO PRÍNCIPE (Agencias).— Haití lloró ayer a las más de 300 mil víctimas de su devastador terremoto del 12 de enero de 2010, en un sombrío primer aniversario marcado por el pesimismo sobre la lenta reconstrucción y la incertidumbre política.

Modificando al alza las estimaciones previas de 250 mil muertes provocadas por el temblor, el primer ministro Jean-Max Bellerive dijo que la recuperación de cadáveres adicionales durante el año dejaba la cifra total en “más de 316 mil personas”.

El funcionario habló en rueda de prensa junto al ex presidente de Estados Unidos y enviado especial de la ONU en Haití, Bill Clinton, luego de que miles de haitianos, muchos vestidos de blanco, asistieron a conmovedoras misas en memoria de los fallecidos en diversas zonas de la capital del golpeado país caribeño.

En una ceremonia celebrada en las ruinas de la catedral nacional en la devastada capital Puerto Príncipe, a la que asistió el enviado papal a Haití, muchos dolientes extendían sus brazos gritando los nombres de los seres queridos que perdieron en el terremoto e implorando la ayuda de Dios.

Críticas a fuerzas de la ONU

En señal de la frustración popular por el lento ritmo de los esfuerzos de reconstrucción respaldados por la comunidad internacional, unos 60 manifestantes mostraron letreros en el centro de la ciudad criticando a las fuerzas de paz de la ONU y a las ONG. Un letrero condenaba la “ocupación” de Haití, mientras otros decían “Las ONG están botando dinero”.

Pero, en general, el ánimo era tranquilo y sombrío en la devastada ciudad litoral, que permanece cubierta de escombros tras el gran terremoto que azotó a la empobrecida nación caribeña a las 16:53 horas un año atrás. Pese a una abundante solidaridad para Haití desde todo el mundo, miles de millones de dólares en promesas de ayuda y una operación humanitaria en curso, los locales dicen que siguen esperando ver un impacto positivo en el Estado más pobre del hemisferio occidental.

Se entregó 63% de la ayuda

En los últimos días, Naciones Unidas dio a conocer que en 2010 sólo se entregó el 63.6% de la ayuda prometida para ese año por la comunidad internacional, durante la conferencia de donantes para Haití celebrada en marzo pasado. Se estima que los esfuerzos para reconstruir Haití alcancen los 10 mil millones de dólares.

“Si la reconstrucción fuera seria, la misa habría sido dentro de la iglesia, ya reconstruida”, dijo Carla Fleuriven, que a sus 19 años tiene tres hijos e iba vestida con una falda y blusa blancas.

El 12 de enero del año pasado, la joven vio cómo colapsaba la catedral, junto a su casa, y ahora vive en un albergue improvisado. Ella es una de los más de 800 mil sobrevivientes del terremoto que no tienen hogar y siguen acampando en tiendas 12 meses después del desastre. El director del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Latinoamérica, Heraldo Muñoz, explicó que las labores de reconstrucción han sido difíciles, porque, entre otras circunstancias, la cantidad de escombros fue “diez veces mayor” que la que se produjo en la caída de las torres gemelas de Nueva York, el 11 de septiembre de 2001. Unas tareas de remoción que en el caso de Estados Unidos demoraron más de 2 años. En Haití hay más de 10 millones de metros cúbicos de escombros.

Agencia El Universal