Aguascalientes, Ags.- Por novena ocasión, especialistas en estadísticas con enfoque de género se reúnen para avanzar en los criterios que faciliten las comparaciones internacionales que evidencien el trabajo de las mujeres como la potente mano invisible del trabajo no remunerado en el bienestar de las familias, así como el impacto que tienen en las economías.
Durante el primer día de trabajo, de la IX Reunión Internacional «Políticas Públicas, uso del tiempo y economía del cuidado: La importancia de las estadísticas nacionales», los especialistas dijeron que los avances en materia estadística demuestran que las actividades que se realizan en el hogar –en su mayoría por mujeres- son consideradas como “no trabajo”; modalidad que se conoce también como “actividades del cuidado”.
En la medición de estas actividades México es el primer país de América Latina que calcula el valor y el volumen del Trabajo No Remunerado de los Hogares, el cual forma parte del Sistema Nacional de Cuentas oficiales e incrementa en forma significativa la base estadística con enfoque de género no sólo para el país.
Este indicador, explicaron, se convierte en un referente para América Latina con el objetivo de que cada Estado genere políticas públicas que contribuyan al bienestar de las familias, especialmente de las mujeres quienes son las que asumen la doble carga de trabajo que les genera su participación en los ámbitos público y privado.
De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la tasa de participación femenina en la fuerza laboral aumentó del 35 por ciento en 1980 al 53 por ciento, actualmente.
Esta cifra, muestra que los sistemas económicos actuales convierten a las mujeres en pobres de tiempo, lo cual se traduce en violaciones a los derechos humanos y limita sus opciones y libertad para lograr autonomía económica, y acceso a puestos de trabajo de acuerdo con sus competencias e intereses.
Con esta reunión, las y los especialistas en estadísticas con enfoque de género pretenden contribuir a la generación de políticas públicas en la región con las cuales los Estados asuman su responsabilidad en las actividades del cuidado y no sean trasladadas a los hogares.
En la inauguración, el Presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Eduardo Sojo, anunció que en breve se realizará la Encuesta Nacional de la Dinámica de la Relación en los Hogares.
Asimismo, destacó que actualmente el 25 por ciento de los hogares mexicanos son encabezados por una mujer, cifra que en el año 2000 era del 20 por ciento.
Por su parte, Dolores de los Ángeles Nazares, Presidenta de Equidad Género de la Cámara de Diputados, mostró su beneplácito al saber del levantamiento de la Encuesta Nacional de la Dinámica de la Relación en los Hogares que proporcionará información a los tres órdenes de gobierno sobre la situación de las mujeres. “La generación de estos indicadores dará respuesta concreta a problemas específicos de equidad y género”, dijo.
En su participación, Luis Beccaria, Director de la División de Estadística y Proyecciones Económicas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) reconoció la generosa contribución del INEGI, la cual permite a México y a la región de América Latina contar con información fidedigna sobre equidad y género en beneficio de las Mujeres.
“El INEGI es un aliado importante por su contribución a la generación de información por sus reconocidas técnicas y metodologías, pues son la base para la formulación, aplicación y revisión de políticas públicas”, mencionó.
Ana Güezmes, Directora Regional de ONU Mujeres dijo que el reto en la región es contar con indicadores armonizados que permitan alcanzar los objetivos de la valoración de la contribución de las mujeres y lo que significa esta contribución en su calidad de vida y en el ejercicio de sus derechos. Asimismo destacó que en América Latina el INEGI es pionero en la presentación de estadísticas confiables en esta materia.
Al respecto, la Presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, INMUJERES, Rocío García Gaytán dijo que gracias a las encuestas de uso del tiempo y otros instrumentos diseñados por el INEGI sabemos que en México el valor del trabajo no remunerado, como proporción del Producto Interno Bruto, se ha incrementado, siendo más alto que el de la manufactura.
“Sabemos que las mujeres ocupadas en el sector informal dedican, en promedio, 21 horas a la semana a cuidar sin pago a niñas y niños, personas mayores o enfermas, y en el formal 19 horas”.