La Sierra Gorda, maravilla de la naturaleza

Surgida del lecho marino hace unos 60 millones de años, la Sierra Gorda escarpa hoy las nubes del techo queretano. Los cerros aún lucen los tatuajes de su pasado marino, fósiles de caracoles y otras bestias primitivas. Pero la fauna y flora ha proliferado en su cumbres, ríos y valles con excepcional fecundidad. Lo abrupto de su topografía le otorga la presencia de los principales ecosistemas del país, desde el desértico hasta el bosque de niebla.

Principales atractivos

La Sierra Gorda es más que la suma de sus partes; es decir, la magnificencia de sus atractivos naturales radica en un conjunto de ríos, cascadas, sótanos, cuevas y resumideros que componen la zona más heterogénea del país. Recorrer la Sierra Gorda significa ir cambiando de paisaje cada 15 o 20 minutos: semidesierto, bosque tropical, bosque de niebla, selva alta, selva baja; paisajes áridos, verdes exuberantes, matorrales, coníferas, encinos. En resumen, el viajero nunca se aburre y la cámara nunca para.

Sótano del Barro

Sobre las colinas de la Sierra Gorda ha quedado abierto un agujero para echar un vistazo a las entrañas del planeta. Al mirar su fondo, uno deja caer lo mismo la fascinación que el aliento. Con 500 metros de diámetro y 450 de caída libre, este es, en verdad, uno de los abismos más profundos de la Tierra. También es casa de una gran diversidad de fauna, entre la que destaca la guacamaya verde, especie en peligro de extinción cuyas parvadas, saliendo de la fosa por las mañanas, son, sin duda, uno de los espectáculos más asombrosos. La travesía para llegar es materia de intrépidos: 26 km de terracería desde la comunidad de Puerto de Ayutla y dos horas atravesando un denso bosque.

Cascadas

De vez en cuando, los ríos pegan saltos imprevistos por la pendiente de las montañas, dibujan formas caprichosas, se desploma el afluente del agua y se impacta con fuerza, produciendo sonidos a la vez renovadores y armónicos. La cascada El Salto, a 16 km de la comunidad de San Pedro Escanela, participa del cambio de clima de boscoso a tropical con sus 35 metros de caída libre que se defracta en varios niveles de pozas. La cascada El Chuveje, en Pinal de Amoles, golpea una fosa de 30 metros de diámetro en la cuál es posible bañarse.

Ríos

Como todo ser viviente, la Sierra Gorda tiene venas. Por ellas viaja la vida que fecunda al estado, y que baja por cañadas, bosques, junglas y pueblos, tatuando la superficie de los cerros con el rumor de las aguas: esta es la voz de la sierra.
El río Escanela, en el municipio de Pinal de Amoles, es un núcleo ecológico en el que es posible regresar a los orígenes: bañarse en el Cañón de la Angostura, un manso arroyo de 50 metros de longitud, o internarse en el Puente de Dios, venerable caverna con formaciones de estalactitas. En Las Adjuntas, municipio de Arroyo Seco, confluyen los ríos Santa María y Ayutla, generando un paisaje majestuoso.

Gruta Los Herrera

Ubicada a cinco minutos del pueblo minero de San Joaquín, esta gruta se ha ido formando durante miles de años. Hoy puede ser apreciada en tan solo uno minutos. Este es uno de los sitios en donde la visión es literalmente milenaria; no se ven sólo formaciones rocosas, se ven milenios. Aquí, la naturaleza esculpe en el tiempo: estalactitas y estalagmitas formadas en las entrañas de la Tierra lo demuestran.

¡Tienes que conocer estos magníficos paisajes!

Fuente: queretaro.travel