México.- La literatura policiaca «está sana y en buena forma, es un género que a diferencia de otros, como el ensayo, la ficción y el histórico, está repuntando», aseguró aquí el escritor mexicano Francisco G. Haghenbeck (1965).
Entrevistado a propósito de su más reciente publicación, El caso tequila, el autor, único mexicano que ha escrito una versión de Superman para DC Comics, consideró que la novela policiaca «es la única que se está cultivando en la actualidad».
«La única novela que se sigue cultivando es la policiaca y se puede ver con autores como Bernardo Fernández, ganador del premio Grijalbo de Novela 2011; Elmer Mendoza e Iris García, entre otros, hay una generación que escribe este género que en mi opinión se refleja muy bien, como un espejo que deforma la realidad, o que nos da una pincelada de lo que es nuestra realidad» señaló el escritor.
De acuerdo con el también creador y escritor de Alternation, otros géneros como la ficción se encuentran en declive, además de que son pocos los escritores que abordan este otro estilo. «Ahora, todos son ensayos sobre candidatos políticos, libros históricos o novelas históricas», señaló.
Bajo el sello Rocacriminal, en El caso tequila Haghenbeck acerca al lector a una novela policiaca, una historia de gansters famosos, todo ello de la mano del detective «Sunny Pascal».
Seis matones asaltan un laboratorio, dejan 12 muertos y se llevan dos toneladas de pseudoefedrina; un detective es contratado para proteger al actor Johnny Weissmuller en el festival de cine de Los Angeles; un exconvicto, «Elvis Infante», tiene el don de capturar demonios y hay quien le paga por sus servicios, éstas son algunas de las travesías que recorre «Pascal» en más de 200 páginas.
‘Se llama El caso tequila porque «al detective le gustan los cocteles, incluso, cada capítulo comienza con la receta e historia de un coctel», indicó el autor al tiempo que mencionó que dicha historia está inspirada en las anécdotas del hijo de Johnny Weissmuller durante su estancia en Acapulco en la década de 1960.
«Conocí al hijo de Jonny Weissmuller cuando vivía en Puerto Vallarta, íbamos a pescar juntos; en la pesca me platicaba sus facetas que vivió en Acapulco y de ahí me inspire, del glamour de la época de los 60 en ese puerto», recordó.
Según Haghenbeck, el protagonista de esta novela, el detective «Pascal», es como una segunda personalidad que deseaba ser. «Es un personaje que, a la vez, refleja mucho al mexicano, es el héroe que llega y gana al final, pero que termina golpeado; es un sobreviviente, está metido en aguas pantanosas entre la mafia, pero al final sale bien librado», indicó.
Comentó que la novela es del estilo de la década de 1920, época en la que se empleaba una literatura en donde se usaban mucho las metáforas; es para amantes del género policíaco, «una publicación para quien le guste la lectura. Es una novela divertida y con mucho humor, así es como debe ser la literatura, divertida, pues al final la gente se tiene que divertir», concluyó el autor.
Agencia El Universal