Luis Nishizawa nos acercó valiosas claves para comprender a México y maravillarnos ante la plenitud, la complejidad y la armonía del espíritu humano, reconoció el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor, durante un homenaje póstumo al pintor y escultor.
Al señalar que en este edificio, donde se concibe a la educación como una suma de elementos que detonan el movimiento de ideas y sensaciones, el titular de SEP destacó que la obra de Nishizawa encuentra, sin duda alguna, una digna morada.
Reunidos en el edificio sede de la SEP, dijo: le ofrecemos al maestro homenajeado que siempre la institución que formara José Vasconcelos habrá de tenerlo como referente para formar nuevos mexicanos con capacidad de responder a los problemas de la vida.
Ante una obra que refleja la esencia de su autor La Imagen del hombre, parte del sincretismo, del equilibrio de símbolos y tradiciones, nos lleva a afirmar que somos energía y movimiento, espíritu que trasciende por medio de la creación, señaló.
Así, La imagen del hombre hace más evidente la necesidad de seguir construyendo, aprendizaje que consideren a la ciencia, a las humanidades y al arte, medios que estimulen el pensamiento y la sensibilidad de las nuevas generaciones.
Acompañado por el Presidente del Consejo Nacional para las Cultura y las Artes (Conaculta), Rafael Tovar y de Teresa, el titular de la política educativa dijo que la pérdida física del pintor Nishizawa deja un vacío imposible de llenar, pero al despedirlo lo hacemos con una invitación a explorar y conocer su obra plástica, porque la cultura es un conjunto de respuestas colectivas a las necesidades vitales.
En presencia de los hijos del artista: Luis, Gabriel, Adriana y María Eva Nishizawa, el Secretario de Educación Pública recordó que fue un hombre sencillo que siempre estuvo en contacto con la tierra que lo vio nacer, el Estado de México, donde demostró que con una técnica artesanal como la cerámica vidriada alcanzó la universalidad.
Afirmó que aunado al respeto y admiración que siempre le profesó desde hace más de 30 años, agradeció el generoso apoyo que recibió para hacer realidad la creación del Instituto Mexiquense de la Cultura, durante su gestión como Secretario de Educación, Cultura y Bienestar Social para rescatar los valores artísticos del Estado de México.
Reconoció que sus notables conocimientos y fervor por las artes se abrieron generosamente en las aulas, donde trabajó con ímpetu compartiendo experiencia en el Museo-Taller que lleva su nombre en la ciudad de Toluca.
Asimismo, señaló que tuvo el honor de haberle entregado la Presea José María Velasco en 1984, a partir de la certeza de que las personas ilustres se vuelven símbolos que se deben difundir. Por ello, enfatizó, Luis Nishizawa fue un creador de soluciones únicas que transitó por los estilos y corrientes que dominaron gran parte del Siglo XX.
La conjugación de sus raíces mexicana y japonesa fue el manantial que permitió la creación de un trabajo que irradia belleza por las formas, las técnicas y los materiales, así como el contacto permanente con la naturaleza. A través del trazo y el color nos acercamos a nuestra identidad. Por tal motivo sus obras son un reflejo de sus inquietudes en las que nos reconocemos como mexicanos.
Al concluir, el titular de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor, señaló que Luis Nishizawa nos enseñó que la belleza es un lenguaje universal y el arte la expresión más acabada de ese idioma: “El elemento que da cobijo a la humanidad”.
En su intervención, Gabriel Nishizawa mencionó: “mi padre, un hombre de sencillez admirable que conoció a políticos, empresarios, artistas e intelectuales, tuvo esa sensibilidad de un colibrí en su corazón de tonos rosas, morados, lilas y con la fuerza única y mágica de su pincel trazó y pintó infinidad de obras. A él debemos lo que somos, pues su legado vive y permanecerá en nosotros”.
Por su parte, el embajador de Japón en México, Shuichiro Megata, destacó que la obra y nombre del pintor mexiquense son patrimonio de la cultura universal. Fue un verdadero maestro que dejó escuela y su obra trascendió fronteras. Es una lamentable pérdida que en Japón se ha hecho propia, pues el maestro Nishizawa era una combinación de corazón mexicano y espíritu japonés.
Por eso, dijo, reconocemos la trayectoria invaluable del maestro Luis Nishizawa, lo despedimos como un gran samurái azteca y con gran respeto el gobierno de Japón se suma a este homenaje y propuso seguir su ejemplo para continuar estrechando lazos culturales entre ambos países.
Por último, la presidenta de la Academia de las Artes, Louise Noelle Gras, refirió que su legado pictórico le permitió recibir premios y distinciones, como el Premio Nacional de Ciencias y Artes, Premio Universidad Nacional y recientemente la Medalla de Bellas Artes, pues su vasta obra comprende esculturas, murales, grabados, acuarelas, mixiografías, vitales; cuadros entre los que figuran naturalezas muertas, retratos, autorretratos y paisajes.
En representación del gobernador mexiquense, Eruviel Ávila, estuvo el secretario de Educación del Estado de México, Raymundo Édgar Carbajal; así como la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes, María Cristina García Cepeda; el director general del Instituto Mexiquense, Fernando Muñoz Samayoa, entre otros personajes.