México en el lugar 116 en materia de carga regulatoria: CEESP

Aunque en México se han tenido avances en materia regulatoria, es evidente que todavía hay mucho por hacer, pues la regulación sigue siendo costosa para la economía, señaló el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

En su reporte semanal ‘Análisis económico ejecutivo’, el organismo de investigación del sector privado refiere que, de acuerdo con el World Economic Forum, México ocupa el lugar 116 en materia de carga regulatoria.

Expuso que con los objetivos de estimular y aumentar la actividad productiva y liberar recursos que se puedan destinar a la inversión, el Consejo Federal para la Mejora Regulatoria presentó el Plan de Mejora Regulatoria para el bienio 2011-2012.

Mediante este plan, el Consejo buscará implementar mejoras en 11 por ciento de los trámites que considera el Registro Federal de Trámites y Servicios.

Con lo anterior se busca liberar recursos por un monto aproximado de 141 mil millones de pesos, cifra que equivale a 1.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), lo cual refleja lo costoso que actualmente es el marco regulatorio en el país.

El CEESP precisa que para que su efectividad sea mayor, es importante que estas medidas se mantengan en el mediano y largo plazos y no limitarlas por temporalidad, como lo hacen las autoridades al definir la duración del programa a solo dos años.

Las autoridades correspondientes tienen la obligación constante de proponer e instrumentar mecanismos que faciliten la actividad productiva, comenta.

Considera además indispensable que todos los órdenes de gobierno estén inmersos en estos compromisos, ya que si bien en el ámbito federal se ha avanzado en la eliminación de trámites y regulaciones obsoletas, en los gobiernos estatales y municipales todavía es lenta y onerosa la instalación y operación de empresas.

Es fundamental, continúa, que se reformen y homologuen los marcos normativos de los distintos niveles de gobierno para reducir aún más los costos de cumplimiento de la regulación, pues sólo de esta manera se podrá contribuir para lograr el objetivo de tener tasas de crecimiento elevadas y sostenidas en el mediano y largo plazos.

Lo ideal para un país es contar con el ambiente idóneo para hacer negocios, en el que las unidades productivas ya existentes se puedan desarrollar eficientemente y donde abrir una nueva empresa signifique un estímulo y no un medio para alejar a los nuevos emprendedores y, por ende, al capital productivo.

‘En este entorno, es evidente que un sistema regulatorio sencillo, eficiente y transparente es fundamental para que una economía tenga importantes avances en materia de competitividad’, añade el organismo.

Agencia El Universal