Museo de san Carlos…45 años de promover el arte

Una gran colección, entre pintura, escultura, gráfica, mobiliario y algunas fotografías de entre el siglo XIV y finales del siglo XX es lo que resguarda el Museo Nacional de San Carlos (MNSC) que este 12 de junio de 2013 celebra su 45 aniversario.

Su actual directora, Carmen Gaitán Rojo, señaló en entrevista para Conaculta seguir trabajando para el público y honrar al recinto con una trayectoria de prestigio, ¿cómo? “presentando lo mejor posible la colección europea que se tiene bajo resguardo, y creando programas y actividades”.

“El acervo de San Carlos es absolutamente maravilloso, de tal riqueza y bondad que permite que uno lo explote, se mueva de lugar, se le dé distintas fisonomías y hable de manera diferente. ¿Cómo no estar feliz con una colección así? y en un edificio tan rico como éste”, expresó la promotora cultural Carmen Gaitán Rojo.

Un poco de historia

El espacio, que desde hace 45 años contribuye a la difusión de la cultura, fue arrendado en 1899 por la Tabacalera Mexicana hasta 1932. Al año siguiente, en 1933, se estableció la Lotería Nacional, posteriormente, fue sede de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas de 1946 a 1953, y de 1958 a 1965, albergó a la Escuela Preparatoria Número 4.

En 1966, la custodia del inmueble pasó al Instituto Nacional de Bellas Artes, que lo destinó para cuidar parte de la colección de arte europeo que hasta entonces había resguardado la Escuela Nacional de Bellas Artes (antigua Academia de San Carlos).

En 1968, específicamente el 12 de junio, la antigua casona neoclásica, cuya proyección se atribuye a Manuel Tolsá, se transformó en un recinto dedicado al arte y la cultura, dando inicio a una nueva etapa en la vida del lugar construido entre los años 1798 a 1805, por encargo de la segunda marquesa de Selva Nevada para su hijo, el conde de Buenavista.

Una de las más grandes y completas colecciones de arte europeo

El Museo Nacional de San Carlos, a través de su acervo conformado por 2 mil 16 piezas, abarca un periodo de casi seis siglos, donde se encuentran las tradiciones y escuelas artísticas más importantes de Europa.

En el antiguo Palacio se resguarda un acervo único en su tipo en toda América Latina, el cual puede ser visto a través de salas permanentes divididas en los estilos: Gótico, Renacimiento, Manierismo, Barroco, Rococó, Neoclásico, Romanticismo, Impresionismo y Realismo, visitadas por numerosos especialistas, curiosos, aficionados, y conocedores.

En este acervo se encuentran piezas que formaron parte de la colección de la Real Academia de las Tres Nobles Artes de San Carlos de la Nueva España que inició a finales del siglo XVIII; obras que han sido donadas al Museo a partir de su fundación, como el lote de pinturas españolas adquirido por el gobierno en 1910 y las colecciones del ingeniero Alberto J. Pani y del doctor Axel Wenner-Gren.

Al realizar un recorrido por las salas el visitante se encontrará por ejemplo con la obra Escenas de la vida de San Lázaro, (la más antigua de la colección), el Retablo de la Encarnación; con piezas que provienen de países del norte de Europa, Alemania y España; pinturas correspondientes al barroco, de Luca Giordano; así como ejemplos neoclasicistas y del romanticismo como El juicio entre la Virtud y el Vicio, de Francesco Podesti, y Episodio del Diluvio Universal, de Francesco Coghetti, respectivamente.

En los patios y pasillos se pueden observar esculturas en yeso, mármol y metal, ejecutadas por artistas mexicanos y europeos relacionados con la Academia de San Carlos.

El museo, a cuyo acto inaugural asistieron en ese entonces el presidente de la República, Gustavo Díaz Ordaz, el secretario de Educación Pública, Agustín Yáñez y el director del INBA, José Luis Martínez, también resguarda un amplio número de obras gracias a donaciones con las cuales tenemos en México muestras excepcionales de las escuelas española, italiana, flamenca, holandesa, afrancesa, alemana e inglesa.

Restauración

Al viejo Palacio se le han realizado reparaciones y remodelaciones para devolverle su esplendor y asegurar su permanencia en el tiempo, la más reciente realizada entre los años 2011 y 2012.

Carmen Gaitán Rojo, directora desde enero de 2011, indicó que este 2013 se celebran 45 años de promover el arte europeo del siglo XIV a principios del siglo XX y una restauración supervisada por la Dirección de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico Inmueble a cargo del restaurador Ricardo Prado, que estaba programada hace muchos años y que permite el inmueble se presente con un rostro luminoso.

“Este edifico es muy importante -dijo Carmen Gaitán- tiene características barrocas cuando comenzó su construcción y neoclásicas cuando lo terminan. Es uno de los pocos edificios que el arquitecto Manuel Tolsá dejó construidos” (como el Palacio de Minería y la estatua ecuestre de Carlos IV, mejor conocida como El Caballito). Un espacio único en América Latina por el patio oblongo y sus columnas”.

“Me ha tocado la fortuna de estar en la gran rehabilitación de las estructuras del museo, como las balaustradas, las escaleras, el auditorio, toda la parte que no se ve pero que es fundamental. La impermeabilización que se le hizo al edificio, siguiendo las técnicas antiguas que es enladrillar, poner arcilla y después una lechada”, detalló Carmen Gaitán.

Además de la restauración el Museo cuenta con nuevos espacios y servicios como la Galería roja, lugar alternativo para exposiciones o actividades especiales; una Sala Táctil, pensada para atender, en primera instancia, al público ciego y/o débil visual en la que se encuentra la reproducción de cinco obras pictóricas.

El Museo Nacional de San Carlos cuenta con un guía para que invidentes tengan la posibilidad de visitar el museo y conozcan lo que se encuentra en él. Se instaló un elevador que permite a personas minusválidas o de la tercera edad subir a visitar las ocho salas que conforman las exposiciones permanentes, esto con apoyo del Patronato, describió Carmen Gaitán.

Oferta programática

El Museo Nacional de San Carlos, además de mostrar de manera permanente las obras que componen su acervo, se da a la tarea de organizar exposiciones con piezas de otros museos y colecciones como fue la muestra El rostro de la mujer en la historia del arte. Un recorrido del siglo XIV al siglo XXI, o de traer el trabajo de reconocidos artistas internacionales como el del austriaco Gottfried Helnwein con el montaje Fe, esperanza y caridad.

Estas exposiciones son una muestra de que el Museo Nacional de San Carlos cuenta con todos los parámetros internacionales en clima, seguridad, y museografía para recibir préstamos importantes.

Pero su oferta museística no se queda sólo en los muros del edificio ubicado en Puente de Alvarado No. 50, colonia Tabacalera, también salen a la calle, como el programa Extramuros, el cual consiste en visitar en los hospitales a niños enfermos. “En un portafolio se les lleva reproducciones de obras del museo y se les explica de manera didáctica y sencilla lo que es una obra de arte”.

El Museo Nacional de San Carlos en el Mercado de Jamaica es otro de los programas que se realiza fuera de la sede del museo, éste consiste en colocar en pasillos del mercado reproducciones de obras pictóricas que forman parte del acervo y con las cuales, comenta Carmen Gaitán, “el cliente que compra flores, de pronto se encuentran con que hay un enorme banner que le habla del Museo Nacional de San Carlos”.

“Como lo ha dicho el presidente del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, no hay mejor manera de construir el tejido social que a través de las manifestaciones culturales. ¿Cómo llegar al público? Pues haciendo exposiciones colectivas, actividades paralelas y teniendo permanentemente lecturas, conferencias, conciertos”.

El recinto también es sede de las actividades Pasaporte del Arte, coordinadas por el INBA, la oferta de Alas y Raíces del Conaculta, y del programa Leo, Luego Existo.

San Carlos para todo público

En opinión de quien fuera directora del Museo Mural Diego Rivera, el Museo Nacional de San Carlos va dirigido a todo público. “Nosotros tenemos un importante departamento de servicios educativos que hacen muchísimas actividades precisamente para que las distintas manifestaciones artísticas, por ejemplo, en el imaginario del niño no se instalen como: ¡ay qué flojera! pintura antigua, ya la vi, no la entiendo”.

“Nuestra obligación con nuestros servicios educativos es desarrollar metodologías innovadoras que hagan que el niño se acerque, se fascine, reinterprete. Con los ojos de hoy, nosotros les decimos a los públicos qué estaba pasando en el siglo XVIII y XIX, XIV y XVII, es nuestro deber hacerlo atractivo”.

Para la funcionaria pública con más de 30 años de experiencia en la coordinación, gestión y promoción de las artes plásticas, no se debe olvidar que un museo es un lugar de conocimiento, educación. “Como promotores culturales y directivos del museo estamos obligados a transmitir conocimientos por eso es que en San Carlos tratamos de tener una serie de actividades, hacerlas llegar al público y que las disfruten”.

Carmen Gaitán Rojo recalcó su interés en establecer contacto con los públicos marginados. “La persona que tiene capacidad y dinero para venir es absolutamente bienvenida, pero nosotros debemos buscar a aquellos públicos que están en situación vulnerable para que entren en contacto con una manifestación que no le es fácil allegarse. Somos nosotros los que vamos muchas veces a buscarlos precisamente con la intención de poder proporcionarles, digamos, un conocimiento”.

Al iniciar su administración, Carmen Gaitán se enfrentó con el principal de reto de atraer al público, que éste se acercara y viera el recinto con otros ojos. “Vengan a pasarse un fin de semana hermoso a San Carlos, es como si fuera un viaje en el tiempo, uno entra y pareciera que el tiempo del siglo XXI desapareciera. Ha sido un reto hacer que este edificio de 1804 entre en la diversión del 2013. No porque nos acoten estos siglos en el tiempo no vamos a estar a la vanguardia”.

Celebración por el 45 aniversario

El Museo Nacional de San Carlos arrancó este año los festejos del 45 aniversario con la exposición Prodigios de la luz. Sorolla y sus contemporáneos, que extenderá su exhibición hasta el mes de septiembre próximo.

El miércoles 12 de junio se inaugurará la muestra Voces y trazos de grandes maestros, exposición que se conforma con 29 obras que muestran la variedad de estilos, formatos y temas de las diversas corrientes artísticas que conforman el acervo del recinto.

“Escogimos piezas de cada uno de los estilos del acervo para que el público se acerque y se aproxime a lo más representativo de cada estilo. Muchos dirán: es pintura de los viejos maestros, ya están muy vistas. Depende de cómo estén colgadas, de cómo se hizo la museografía. En esta ocasión están colgados como se los gabinetes maravilla, es decir, las paredes se llenaban”, precisó Carmen Gaitán.

“Lo que hacemos es colgarla de tal manera que el público descubra y se compenetre con los diferentes artistas que tenemos, como Cranach, Landesio, Giordano”.

Otra de las actividades realizadas en el marco de la celebración es un ciclo de conferencias magistrales, en las que se abordarán temas relacionados con el museo, como el coleccionismo, la arquitectura del Palacio de Buenavista, el arte académico y sobre pintura de diversas épocas y estilos con el propósito de ofrecer ofertas académicas de alto nivel para el público interesado.

El miércoles 12 de junio, previo a la inauguración de la muestra Voces y trazos de los Grandes Maestros, Ricardo Prado hablará sobre el Museo Nacional de San Carlos desde el punto de vista arquitectónico, ya que fue el encargado de la restauración del recinto.

Para el sábado 20 de julio, Hugo Arciniega disertará en torno a la Arquitectura del siglo XIX, Manuel Tolsá; el 24 de agosto Clara Bargellini hablará sobre pintura italiana; María Luisa Durán abordará el 19 de octubre el tema arte medieval. El ciclo de conferencias lo cerrará Teresa del Conde, el 23 de noviembre, con su ponencia Pintura barroca, en la que pondrá énfasis en la obra del Museo de San Carlos.

Haciendo historia

Museógrafos, curadores, investigadores, conservadores, técnicos, administradores y personal han contribuido a escribir la rica historia de 45 años de difusión del arte europeo en el MNSC, bajo las direcciones de Enrique F. Gual (1968-1973), Felipe Lacouture Fornelli (1973-1977), Graciela de la Torre (Reyes Retana) (1977-1989), Leonor Cortina (1989-1992), Guadalupe León de Margain (1992), Elisa García Barragán (1993-1996), en su gestión alcanza el grado de Museo Nacional; Roxana Velásquez Martínez del Campo (1997-2004), y María Fernanda Matos Moctezuma (2004-2011).

“Este 45 aniversario se refrendan las actividades del museo. Yo soy alguien que recibe la estafeta de otros directores que estuvieron detrás de mí, cada uno, en su momento, hizo algo por San Carlos. A mí me ha tocado la fortuna de estar en la gran rehabilitación. […] San Carlos en sí es ya un personaje, es un edificio que sigue vivo, al que se le han hecho adecuaciones, eso le da larga vida. Nosotros pasaremos, nos moriremos y San Carlos estará de pie”, expresó la actual directora Carmen Gaitán Rojo.