
El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, llegó a Damasco este domingo, dos días después de un encuentro en Viena de líderes mundiales y regionales que evaluó posibles salidas al conflicto que aqueja a ese país árabe desde 2011.
De Mistura, que permanecerá tres días en Siria, participó en la reunión junto a los ministros de exteriores de 17 países y la Unión Europea. Por primera vez en este tipo de esfuerzos se contó con la presencia de Irán.
En un comunicado, el Secretario General de la ONU dio la bienvenida al resultado del encuentro y felicitó a sus asistentes, en especial al Secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y al Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov.
Aunque reconoció que existen diferencias importantes, Ban expresó sus esperanzas de que en los próximos días y semanas estas puedan superarse y se puedan obtener consensos.
Tras afirmar que el pueblo sirio ha sufrido por demasiado tiempo, el Secretario General urgió al gobierno y a la oposición sirias a adoptar todos los pasos posibles para apoyar los acuerdos alcanzados en Viena.
Los participantes llamaron a un cese del fuego en todo el país y la reanudación de las conversaciones auspiciadas por la ONU entre el gobierno y la oposición, pero no lograron ponerse de acuerdo sobre la cuestión de qué papel debe tener el Presidenre Bashar el Assad en el futuro Siria.