Medio Oriente y África del Norte son escenario de los conflictos más agudos y de las emergencias humanitarias más graves de la actualidad, además de que las organizaciones terroristas avanzan en influencia y complican la búsqueda de soluciones, advirtió hoy Ban Ki-moon.
El Secretario General de la ONU participó en la sesión de alto nivel del Consejo de Seguridad, convocada por Rusia, para discutir las crisis y el combate al terrorismo en esa región.
Ban señaló que si bien la realidad de cada país es diferente, Iraq, Libia, Siria y Yemen viven sometidos a horrores similares debidos a conflictos particulares.
“Siria ha mostrado ser el más intrincado. Ha generado un peligro tras otro: el uso de armas químicas, el crecimiento del ISIS y otros grupos extremistas, la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial y el desplazamiento de ocho millones de personas dentro del país”, apuntó.
Añadió que es preciso tomar medidas urgentes para proteger a los civiles de las violaciones generalizadas de las leyes humanitarias y de derechos humanos internacionales, y para garantizar la rendición de cuentas de quienes cometan esos atropellos.
Ban apeló una vez más al Consejo de Seguridad a apoyar firmemente al enviado especial de la ONU en la promoción de una transición política y creíble, según el Comunicado de Ginebra.
Asimismo, aseveró que no es suficiente luchar contra el terrorismo, sino que hace falta prevenir el extremismo violento, evitando acciones que alimenten el resentimiento y la alienación.
En este sentido, adelantó que presentará a los Estados miembros un plan de acción con directrices para que la comunidad internacional trabaje unida en esa tarea.