Tras la muerte a tiros de la reportera Alison Parker y el camarógrafo Adam Ward mientras llevaban a cabo una entrevista en directo, sus respectivas parejas lloran su pérdida.
La recientemente prometida de Ward, Melissa Ott, presenció en vivo el trágico suceso desde la sala de control del canal en el que ambos trabajaban, la afiliada de CBS WDBJ-7-según nota de People en Español-.
Durante la transmisión en directo en un centro de vacaciones cerca de Roanoke, Virginia, Vester L. Flanagan, de 41 años, también conocido como Bryce Williams y quien había sido reportero del canal, se acercó lentamente por detrás de la pareja de periodistas y abrió fuego contra ellos y la mujer que estaba siendo entrevistada en ese momento, según las autoridades.
Parker y Ward murieron al instante, aunque la cámara del joven de 27 años captó desde el suelo una imagen de Flanagan, lo que permitió su identificación.
El novio de Parker, Chris Hurst, tras enterarse de la tragedia y todavía en shock le dedicó unas emotivas palabras en su cuenta de Facebook acompañadas de varias fotos.
«No habíamos compartido esto públicamente, pero Alison Parker y yo estábamos muy enamorados. Nos acabábamos de ir a vivir juntos», comenzó relatando Hurst, de 24 años.
«Estuvimos juntos casi nueve meses. Han sido los mejores nueve meses de nuestras vidas. Nos queríamos casar.
Acabábamos de celebrar su 24 cumpleaños. Ella era la mujer más radiante que he conocido y por alguna razón me quería a mí. Ella amaba a su familia, a sus padres y a su hermano», añadió el también presentador del canal WDBJ-7, quien además tuvo palabras para el compañero de trabajo de Parker.
«Ella trabajaba con Adam todos los días. Eran un equipo. Me rompe el corazón pensar en su prometida. Ella es nuestra productora del show matutino», escribió Hurst.
Chris también quiso destacar detalles de la personalidad de su fallecida novia, diciendo que estaba «llena de vida, sueños, amor y periodismo increíble».
El presunto autor de los disparos grabó el crimen en un video que compartió en las redes, en las que trató de justificar su acto asegurando que Parker había «hecho comentarios racistas» en algún momento y que Ward le había denunciado al departamento de recursos humanos después de «haber trabajado juntos una vez».
El gerente general de la WDBJ7, Jeff Marks, describió a Flanagan como un hombre «infeliz», quien «rápidamente se ganó una reputación como alguien con quien era difícil trabajar» y fue finalmente despedido.
Además, Marks contó que Flanagan inició una reclamación en la Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC, por sus siglas en inglés) en la que acusó de racismo al canal, pero su denuncia fue «rechazada».
Flanagan aparentemente envió un fax de 23 páginas a la cadena ABC en el que explica que el tiroteo en una iglesia de Charlestone, Carolina del Sur, el pasado junio fue clave para que llevara a cabo su agresión. «Mi enfado ha ido creciendo de forma constante… He sido un barril de pólvora humano por un tiempo… esperando para hacer ¡Boom!», escribió en el comunicado, según ABC News.
Tras una persecución por parte de la policía, Flanagan se disparó a sí mismo, falleciendo poco después en un hospital de la zona, contaron las autoridades de Virginia.