Este será un año de importantes retos, para los que debemos estar preparados, señaló el presidente Enrique Peña Nieto durante su mensaje.
«Es un gusto saludarlos al iniciar 2017. Espero que hayan celebrado en familia las fiestas decembrinas y de Año Nuevo. Este será un año de importantes retos, retos para México, para el gobierno y para nuestra sociedad. Son retos para los que estamos preparados si los enfrentamos unidos», dijo.
Tras reconocer que «hay mucho enojo y molestia» por el aumento en los precios de las gasolinas, «son sentimientos que entiendo y que comprendo» y procedió a explicar la medida.
Indicó que el ajuste del costo de energéticos no es consecuencia de la reforma energética, ni por nuevos impuestos. Señaló que en todo el mundo el precio del petróleo, de donde se obtiene la gasolina, aumentó cerca del 60 por ciento.
Acotó que se trata «de un aumento que viene del exterior. El gobierno no recibirá ni un centavo más de impuestos por este incremento.» Afirmó que tratar de mantener los costos anteriores «nos hubiera obligado a recortar programas sociales, subir impuestos o incrementar la deuda del país, poniendo en riesgo la estabilidad de toda la economía.»
Estimó que mantener el precio artificial de la gasolina habría representado un gasto adicional de más de 200 mil millones de pesos, «equivalente a paralizar por cuatro meses todos los servicios del Seguro Social…». Además interrumpir dos años completos los apoyos entregados por Prospera; o tres años el Seguro Popular.
Peña Nieto sentenció que «mantener precios artificiales de la gasolina significaría quitarle recursos a los mexicanos más pobres para dárselos a los que más tienen.»
Reiteró que 60 millones de mexicanos, los de menores ingresos, solo consumen el 15 por ciento de la gasolina, mientras que 12 millones, equivalente al 10 por ciento de la población de mayores ingresos, consume el otro 40 por ciento.
inf./Grupo Fórmula