La pesca ilegal no declarada ni reglamentada se estima en 26 millones de toneladas anuales y cuesta entre 10.000 y 23.000 millones de dólares al sector pesquero en ese mismo periodo de tiempo, según estimaciones de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Para combatir este flagelo, se reúnen durante tres días en Oslo, Noruega, las partes del “Acuerdo sobre medidas del Estado rector del puerto”, un tratado internacional vinculante promovido por la FAO que busca evitar y suprimir ese tipo de pesca ilegal. El pacto entró en vigor el mes de junio del 2016.
La FAO destacó que durante el último año casi se duplicó el número de países adheridos a ese protocolo y en la actualidad ya suman 48 los Estados partes, siendo uno de ellos la Unión Europea y sus 28 países.
El Acuerdo limita el ingreso en los puertos de los buques pesqueros que no cumplan con un grupo de normas específicas como son la presentación de las autorizaciones adecuadas para faenar o la muestra de las especies y cantidades capturadas.
Durante el evento se precisarán las responsabilidades de los Estados que forman parte del Acuerdo y los de las Organizaciones regiones dedicadas a la gestión pesquera.
Alicia Mosteiro, oficial de pesca de la FAO en Roma detalló otro importante aspecto a tratar en el encuentro.
“También debemos definir un mecanismo de transmisión electrónica de la información (entre el Estado portuario y la bandera bajo la que opera el buque) para que el inspector posea la información necesaria para realizar su trabajo”, dijo Monteiro.