Querétaro es uno de los estados más pequeños del país, sin embargo, también es uno de los más heterogéneos. La cantidad de atractivos que encierra lo convierten en un estado fascinante, dinámico, colorido y diverso. En Otomí su nombre significa «Lugar del Juego de Pelota» o en purépecha, «Lugar de la Gran Ciudad.»
Teniendo fronteras con los estados Mexicanos de Michoacán, Guanajuato, San Luis Potosí, Hidalgo y el estado de México, Querétaro se encuentra en el centro del país. Siempre se ha ubicado en un cruce de caminos, y no sólo geográficos, sino también históricos: los destinos del país han coincidido varias veces en el estado. Por ello, Querétaro es protagonista en la historia de México. Desde sus inicios indígenas, hace más de 1,500 años, el estado ha sido testigo y partícipe clave en los acontecimientos más importantes de México. Sus majestuosas construcciones, sus museos, sus poblados y sus calles cuentan un pedazo de esta historia que es común a todos.
Querétaro es un destino turístico ideal para el turismo nacional e internacional. Por su cercanía con la ciudad de México, también es un lugar óptimo para convenciones y eventos ejecutivos, ya que su economía está basada en la producción y en el comercio.
Querétaro es uno de los principales estados de México, combina lo interesante de la historia con la magnificencia de la naturaleza, el placer de la buena vida con la adrenalina de los deportes extremos. Cuenta con dos zonas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: la zona de monumentos del Centro Histórico de Santiago de Querétaro y las cinco misiones franciscanas de la Sierra Gorda, que fueron la apoteosis universal del arte barroco. La región serrana ha sido declarada Reserva de la Biosfera debido a la biodiversidad que encierra y a los distintos ecosistemas que conviven en un área tan reducida. La práctica de los deportes alternativos es una constante en todo el estado, desde las expediciones en cuatrimoto a los cañones y ríos de la sierra, hasta los circuitos ciclísticos por las praderas del sur. Después de estas actividades, podrás descansar en alguno de los campamentos ecoturísticos. Por último, queda el descanso en los poblados pintorescos de Tequisquiapan y Bernal, rodeados de viñedos y queserías en donde disfrutarás de la buena vida.
Visita Querétaro, ¡no te arrepentirás!
Fuente: venaqueretaro.com/queretaro.travel