Un leopardo de las nieves, con ardor en sus ojos oscuros y brillantes, con rosetas distintivo en su piel, se frota la mejilla suavemente sobre una cresta rocosa. Una cámara de visión nocturna captura de la criatura enigmática que rocía su perfume, marcando su territorio antes de desaparecer en la oscuridad.
Esta extraordinaria escena es de un video y fotos que fueron tomadas en el otoño del 2011 a traves de una cámara instalada para un estudio de el Gobierno Real de Bután y el WWF en el Parque Centenario de Wangchuck , el área protegida más grande del país.
Las cámaras filmaron tanto a el depredador como a su presa, que van desde el lobo tibetano hasta el ciervo almizclero, lo que sugiere esta área protegida es un refugio clave para la biodiversidad del Himalaya.
«Es emocionante el poder ver a los leopardos de nieve -tal vez la más difícil de todas las especies de montaña en el Himalaya- involucrarse en un comportamiento que de otro modo sólo hubiéramos leído». Dijo el Dr. Rinjan Shrestha de WWF, quien dirigió el equipo de investigación en el Parque Centenario Wangchuck