
Agentes de la policía fiscal rusa allanaron este miércoles las oficinas de Human Rights Watch (HRW) en Moscú, como parte de una serie de controles impuestos a las ONG extranjeras en Rusia.
Rachel Denber, portavoz de la organización, dijo que representantes de la oficina fiscal, acompañados de un recaudador de impuestos, llegaron de improvisto a la sede para llevar a cabo lo que denominaron «una inspección no planificada» -según nota de BBC Mundo-.
Se trata de la más reciente de una serie de inspecciones efectuadas por las autoridades desde la aprobación de una ley el pasado noviembre que obliga a las ONG que reciben financiación del exterior y participan en la política a registrarse como «agentes extranjeros».
Desde entonces, las ONG están sometidas a un régimen jurídico especial y a un estricto control por parte de los organismos gubernamentales, con el fin de evitar que los gobiernos extranjeros influyan en la política rusa.