Drew Brees lo hizo ver tan fácil, que por momentos no parecía que los Santos y Delfines estuvieran en un duelo de invictos.
Brees lanzó para cuatro touchdowns, dos a Jimmy Graham, y empató su propia marca de la NFL al extender a nueve su racha de juegos con 300 o más yardas por pase tras guiar a Nueva Orleans a mantener su marcha perfecta, y quitarle el invicto a Miami, al vencer 38-17 a los Delfines.
Los Santos no perdieron tiempo y en su primer ataque, de 3:08 minutos y 82 yardas en seis jugadas, Sproles abrió el marcador al anotar en carrera de 5 yardas.
Sproles, quien atrapó 7 pases para 114 yardas, incluida una de 48 yardas para preparar su anotación, fue la bujía que Brees eligió para mover a su ataque.
Los Delfines intentaron pelearle al tú por tú a los Santos, pero tras llegar a la zona roja de Nueva Orleans tuvieron que conformarse con un gol de campo que los acercó 7-3.
Ryan Tannehill, pasador de Miami, sufrió un balón suelto en territorio santo y Brees no desaprovechó y con pases de 21 y 12 yardas a Sproles preparó su primer pase de anotación, de 27 yardas a Graham, para poner 14-3 al frente a los Santos.
Lamar Miller acercó 14-10 a Miami al anotar en carrera de 5 yardas, pero en su siguiente ataque, Tannehill fue interceptado por Jabari Greer, quien regresó el ovoide a la yarda 23 de los Delfines para preparar el pase de touchdown de 13 yardas de Brees a Sproles que puso 21-10 arriba a Nueva Orleans.
Brees se conectó con Ben Watson y Graham en pases de touchdown de 4 y 43 yardas para aumentar la ventaja a 35-10 en el tercer periodo.