En los próximos días habrá de definirse quién ocupará la presidencia nacional del Partido Acción Nacional, como sucede en las otras fuerzas políticas, tal definición tendrá un peso específico en la lucha por la candidatura presidencial que libran Javier Lozano, Josefina Vásquez Mota, Santiago Creel, Ernesto Cordero, Alonso Lujambio y los que se acumulen después de la “misa de 12” del próximo domingo.
Sin embargo es válido repasar que ha representado Acción Nacional en el escenario nacional, desde su fundación y hasta dónde, las diferentes corrientes que se disputan el control del partido responden a sus intereses originales.
El PAN surge como una alianza de diversos grupos sociales inconformes con la política nacionalista de Lázaro Cárdenas, algunos estudiosos lo consideran como una respuesta reaccionaria o un partido de banqueros que buscaban una acción política para enfrentar a la alianza de clase que implicaba un desafío a sus capitales, también hay quienes lo ubican como una formación alentada por la iglesia católica.
Lo cierto es que en la formación del PAN confluyen tres corrientes; la de aquellos que luchaban por principios y valores religiosos amenazados por un mundo cada vez mas secular, la corriente laica de profesionales, intelectuales y políticos excluidos ligados a Gómez Morfín a partir de su gestión como rector de la Universidad Nacional, y los grupos de dirigentes empresariales y financieros afectados por la política cardenista.
La fundación del PAN ocurre en la sede del banco de México, su ideólogo, artífice y primer dirigente lo fue Manuel Gómez Morfín, accionista principal junto con Eugenio Garza Sada, por decisión de la asamblea realizada el 29 julio de 1934 del banco de Londres y México, consejero de la cervecería Cuauhtémoc, de los monopolios cerilleros “la imperial” y la “central”, y accionista de varias empresas entre ellas “nacional de drogas”.
Destaca también como fundador, Efraín González Luna – cuyo hijo por cierto fue diputado federal por el Partido de la Revolución Democrática en la LVI legislatura – quien era consejero de la CIA. De “Seguros Monterrey” y de varios bancos en Guadalajara, formado en la militancia católica en donde llegó a dirigir la A.C.J.M. – Asociación Católica de Jóvenes Mexicanos –.
En cuanto al aspecto doctrinario, el PAN, desde su fundación es influido por los principios de la llamada “doctrina social de la iglesia” plasmados en la encíclica “Rerum Novarum” del papa León XIII y actualizados por la “Cuadragésimo Anno” del papa “Pío XI”.
En este contexto Gómez Morfín y González Luna ejercen en el PAN, un liderazgo indiscutido de carácter caudillezco – diríamos un mini-maximato – que se prolonga de hecho hasta la presidencia de Manuel González Hinojosa.
Hacia 1960 se planteo la posibilidad de convertir al PAN, en un partido demócrata cristiano; se establecen vínculos con Rafael Caldera y Vicente Fernández dirigentes de la democracia cristiana en Venezuela, sin embargo con la elección de Christlieb Ibarrola en la convención nacional de 1962 este proyecto es desarticulado, con la renuncia y muerte posterior de Christlieb a la dirección del partido en 1968 la corriente vinculada a la democracia cristiana cobra nueva fuerza encabezada por Efraín González Morfín en nuevo proyecto al cual le denominaron “solidarismo”, inspirado también en tesis filosófico – religiosas.
En la convención nacional celebrada en agosto de 1971 se produce cierto viraje en el partido; lo que pudiera definirse como la “izquierda” de la derecha accede a puestos de dirección encabezados por Efraín González Morfín, Eugenio Ortíz Walls, Luis Calderón Vega, Enrique Creel Luján y Salvador Rosas Magallón entre otros.
Sin embargo este giro reformista quedaría cancelado muy pronto y en febrero de 1972 llegaba a la presidencia del partido José Ángel Conchello, publicista, empleado de la CONCAMIN y hombre vinculado a los grandes empresarios regiomontanos.
Conchello es sustituido por Efraín González Morfín; ello no le impide maniobrar para imponer como candidato presidencial a Pablo Emilio Madero “representante” también de los empresarios nuevoleonenses.
El 8 de Noviembre de 1975 ante el consejo nacional, Efraín González Morfín puntualiza: “debo de anunciar y reprobar ante ustedes la creación y mantenimiento, incluso mantenimiento financiero de otro Partido Acción Nacional, con ideología, organización, jerarquía, lealtades y comunicaciones al margen y en contra del Partido Acción Nacional legítimo y estatutario”.
Abel Vicencio Tovar ocupa la presidencia de 1978 a 1984y en febrero de este año, Pablo Emilio Madero se hace cargo finalmente de la dirección del partido.
A partir de este momento el PAN, se pone a los servicios de la extrema derecha empresarial, quienes lo utilizan consumada la nacionalización de la banca, como instrumento para buscar el poder político; es cuando surge la nueva clase política neo-panista encabezada por Andrés Marcelo Sada ex-dirigente de COPARMEX; Adalberto Rosas “El Pelón, Fernando Canales Clariond empresario de VITRO, José Luis Coindreau también ex-presidente de COPARMEX; Rogelio Sada Zambrano director de VITRO monopolio vidriero del Grupo Monterrey; Francisco Barrio y en este contexto se da el arribo de Manuel J. Clouthier.
Y es a partir de mediados de esta década, cuando se consolida la presencia de Luis H. Álvarez y de una generación que marcaría el rumbo actual de Acción Nacional, Carlos Castillo Peraza, Juan de Dios Castro, Fernando Gómez Mont, Diego Fernández de Ceballos, Felipe Calderón, Cecilia Romero, entre otros…
Volveremos a encontrarnos aquí en “SIN CENSURA”