
Al menos 144 personas han muerto en Myanmar, antes Birmania, a causa del violento sismo que sacudió el país el viernes, declaró el jefe de la Junta de gobierno, que invitó a “cualquier país, cualquier organización” a aportar su ayuda.
El sismo de magnitud 7.7 causó una destrucción generalizada en todo el país, ahora conocido como Myanmar, asolado por la guerra, y se espera que aumente el número de fallecidos, declaró el dirigente, Min Aung Hlaing, en un discurso emitido por los medios de comunicación estatales.
Sismo en Myanmar deja, al menos, 144 muertos; también impacta en Tailandia
El devastador terremoto de magnitud 7.7 que golpeó este viernes Myanmar dejó al menos 144 muertos y en la vecina Tailandia tres personas fallecieron por el derrumbe de un rascacielos en construcción que dejó atrapados a decenas de obreros.
El epicentro del sismo se situó a 16 kilómetros de la ciudad de Sagaing, en Myanmar, a una profundidad superficial de 10 km, sobre las 12:50 locales, indicó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
La sacudida rompió carreteras, que quedaron surcadas por profundas grietas, derrumbó edificios y arrasó el conocido Puente Ava.
Declaran estado de emergencia
El nivel de devastación obligó a la Junta militar que gobierno del país a lanzar un inusual pedido de ayuda internacional y a declarar el estado de emergencia en seis regiones.
- La Unión Europea, Francia e India ya expresaron su disposición a enviar ayuda
El terremoto, cuyo epicentro se situó cerca de la ciudad birmana de Mandalay, estuvo seguido de una fuerte réplica de magnitud 6.4 unos minutos después y desde entonces continúan los sismos en la zona.
El hospital general de la capital Naipyidó, ubicada a 250 kilómetros del epicentro, recibió a cientos de víctimas.
“Nunca vi nada parecido. Estamos intentando manejar la situación”, indicó un médico.
Ante la saturación del hospital, muchos heridos fueron atendidos fuera del recinto, en el suelo o en camillas improvisadas. Algunas víctimas gritaban de dolor y otras yacían en el suelo, con vías intravenosas en el brazo, mientras eran consoladas por sus familiares.
El jefe de la junta de gobierno Min Aung Hlaing visitó el hospital.
El inusual pedido de ayuda de los militares birmanos es un indicio de la proporción de los daños y la posible magnitud del balance de víctimas, en un país donde la infraestructura y el sistema de salud está arrasado por cuatro años de guerra civil.
VÍA| UNO TV
Sé el primero en comentar