•Vazquez Mota polariza más a Acción Nacional
•Parece haber llegado para fortalecer a Madero
•¿Un incondicional de Bejarano para la CDHDF?
Acción Nacional (PAN) vive una pradoja:
Desde hace tiempo busca quién aglutine a sus corrientes internas, pero cuando aparecen los espontáneos aumentan sus problemas.
Sucedió con Juan Manuel Oliva, arropado por las exitosas alianzas con la izquierda y contra el Partido Revolucionario Institucional (PRI), pero la Asamblea Nacional panista cambió la estrategia para elegir candidatos y dirigentes.
Estos no saldrán más de la cúpula, por dedazo del Comité Ejecutivo o por mayoría en el Consejo Nacional, sino por el voto mayoritario de la militancia.
Lástima por el ex gobernador guanajuatense: había recorrido el país y ya contaba con el apoyo de casi dos tercios de dirigentes y comités directivos estatales para suceder a Gustavo Madero.
Y también pasó con Luis Felipe Bravo Mena, quien salió a la palestra ofreciéndose como opción entre los eternos agradecidos con Felipe Calderón (Ernesto Cordero, Luisa María Calderón, Javier Lozano, Maximiliano Cortázar) y el frente de adversarios liderados por el propio Madero.
Calderonista él mismo, lo cual lo desacredita ante muchos correligionarios, Bravo Mena no ha encontrado respaldos suficientes para volverlo a ver en la presidencia del PAN.
VAZQUEZ MOTA LLEGÓ PARA FORTALECER A MADERO
Con la misma bandera de unidad reapareció Josefina Vázquez Mota.
La ex candidata presidencial invoca su independencia de Felipe Calderón, a cuyo despecho y de su delfín Ernesto Cordero fue abanderada azul en 2012 para quedar en tercer lugar.
Ese hecho la descalifica:
Si fue coordinadora de la campaña presidencial de Calderón, secretaria de Educación Pública en su gobierno y operadora suya en la bancada panista en la Cámara de Diputados, no puede negar su raíz.
Más bien, le recriminan los calderonistas aglutinados en torno a Ernesto Cordero, es una traidora y por lo tanto poco confiable.
Tampoco está bien con el otro bando de la polarización panista, el de Gustavo Madero.
El trabajo entre ambos nunca fue terso e inclusive el propio Madero se negó a conducir su campaña y por ello prefirió regresar al Senado de la República.
Dicho de otra manera, los dos bandos, el calderonista y el anticalderonista, desconfían de Vázquez Mota y no la ven con seriedad.
Con una ventaja para Madero: detenta la estructura, la mayoría de los dirigentes estatales le deben el cargo, tiene asegurada la lealtad de la bancada panista en la Cámara de Diputados y gran parte de su grupo en el Senado de la República.
Por algo Cordero no ha podido con Jorge Luis Preciado.
Con estos elementos, Vázquez Mota parece haber llegado a fortalecer a Madero y a la inmensa mayoría de panistas cuyo grito de batalla interno es:
-¡Fuera Calderón del PAN!
BEJARANO QUIERE UN INCONDICIONAL EN LA CDHDF
1.- Los rumores comenzaron el miércoles y se multiplicaron ayer:
El próximo presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) será mujer y los consensos en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) van hacia la doctora Perla Gómez Gallardo.
Siguen las negociaciones con el grupo bejaranista, el cual impulsa a Manuel Fuentes, con sello similar al de René Bejarano, mejor conocido como El Señor de las Ligas.
2.- Manlio Fabio Beltrones ha iniciado un ejercicio singular:
Envía a organizaciones empresariales y sociales un mensaje con los principales detalles de la reforma fiscal recién aprobada por el Congreso de la Unión.
No impacta, les subraya, donativos a asociaciones civiles pero sí evita su invocación para eludir impuestos.
Al limitarlos al siete por ciento de los ingresos, se elimina una larguísima perversión de utilizar membretes de beneficencia para no cumplir las obligaciones empresariales con el fisco.
Y 3.- apenas se aprobó la reforma hacendaria en el Senado de la República, desde el gobierno rindieron un reconocimiento al priísta veracruzano José Yunes.