Yucatán presenta iniciativa para reestructurar su deuda pública, busca reducir 5% la tasa de interés

Mérida, Yucatán.- Yucatán cuenta con una sólida y confiable capacidad de pago y un bajo nivel de endeudamiento, que conjugados con las condiciones del mercado financiero mundial, lo ponen en inmejorables condiciones de reestructurar y refinanciar mil 335 millones de la deuda pública, lo que permitirá disminuir hasta en un cinco por ciento la tasa de interés y generar un ahorro de alrededor de 100 millones de pesos, afirmaron autoridades estatales.

Ante ello, los secretarios de Planeación y Presupuesto, Ulises Carrillo Cabrera, Hacienda, Juan Ricalde Ramírez, y el consejero Jurídico, Sergio Cuevas González, presentaron en rueda de prensa una iniciativa de decreto de refinanciamiento de la Deuda Pública del Estado, que este día entregaron al Congreso local para su análisis, dictamen y posterior aprobación.

De acuerdo a lo proyectado en dicha propuesta, se establece que actualmente Yucatán tiene comprometido el 23.8 por ciento de sus participaciones de ingresos federales, pero con esta estrategia financiera se reduciría en un cinco por ciento, alcanzando el 18.8 por ciento, lo cual posicionará al estado como el quinto con menor endeudamiento a nivel nacional.

Además, se expone, se obtendrán ahorros superiores a los 100 millones de pesos a valor nominal y los plazos de los empréstitos a contratar no serán modificados, siendo de hasta 197 meses para el refinanciamiento del crédito del Banco del Bajío y de hasta 160 meses con Bancomer.

Al abundar en la propuesta, Carrillo Cabrera precisó que el objetivo es mejorar los términos y condiciones la deuda estatal para reducir el flujo que se destina a ese rubro y, con ello, abrir espacios presupuestales para robustecer las finanzas estatales y fomentar acciones que aporten en beneficio directo de los yucatecos.

«En términos generales, con esta acción, de ser aprobada por el Congreso, obtendremos mejores condiciones de financiamiento, disminuiremos el porcentaje de participaciones otorgadas en garantía y la deuda estatal, al tiempo que haremos más eficiente el uso de los recursos», apuntó.

En su turno, el titular de Hacienda estatal, precisó que por el momento Yucatán figura como el sexto estado con menor deuda pública directa según los registros de la Secretaría del ramo federal y mantiene una calificación crediticia «A», mientras que los dos empréstitos contratados en 2009 fueron confirmados con calificación «AA», tanto por Fitch Ratings como por RR Ratings.

A su vez, Cuevas González indicó que se presentará ante el Poder Legislativo local la iniciativa de decreto de refinanciamiento basado en el artículo siete de la Ley de Deuda Pública, tal y como se hizo cuando se acudió ante ese órgano para solicitar la autorización para contraer el empréstito.

Por lo que toca a la deuda pública estatal, Carrillo Cabrera detalló que hasta el momento asciende a mil 644 millones de pesos, de los cuales mil 335 fueron contraídos con las mencionadas instituciones bancarias, por lo que calificó como falsas las afirmaciones de que la deuda de Yucatán supere los seis mil millones de pesos.

El monto del endeudamiento representa el 7.9 por ciento del presupuesto anual y el uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del estado, cifras por mucho inferiores en comparación al ámbito federal, en donde la deuda significa el 105 por ciento del presupuesto y el 30 por ciento del PIB nacional, puntualizó.

Respecto a los recursos provenientes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el funcionario aclaró que con esa institución financiera se cuenta con una línea de crédito de hasta dos mil 600 millones de pesos y aclaró que no se ha contraído deuda por esa cantidad.

A pregunta expresa, el secretario de Planeación negó que la deuda a proveedores ascienda a mil millones de pesos, al tiempo que especificó que esos compromisos forma parte del gasto corriente anual y no de la deuda estatal multianual, en tanto que aclaró que los esquemas de PPS solo se tiene uno y el Estado no pagará ni un pesos, sino hasta que se concluya la obra en su totalidad.

Esos temas se han politizado, se han dicho falsedades, porque las calificaciones que han recibido nuestras finanzas nos dejan ver que son sólidas, robustas y el nivel de deuda totalmente manejable, finalizó.